Por: Redacción/

Las presidencias de las Comisiones de Administración Pública Local y de Planeación del Desarrollo del Congreso local, a cargo de la diputada Guadalupe Chavira de la Rosa y del diputado Federico Döring, respectivamente, se pronunciaron en favor de construir un instrumento democrático en la materia; incluso que quien encabece el Instituto de Planeación tenga sensibilidad social.

Durante la mesa denominada Participación Ciudadana, Derechos Humanos y Evaluación en el Sistema de Planeación, en el marco del foro Desarrollo y Planeación Democrática para la CDMX, la diputada Chavira de la Rosa expuso que la legislación correspondiente debe ser un instrumento democrático.

“Siempre he creído que hay equilibrio de poderes y hay que hacer instrumentos que doten a la ciudad para tener mayor certeza de lo que será un gobierno de largo plazo”, añadió la diputada integrante del grupo parlamentario de MORENA.

En el foro, organizado por las Comisiones de Administración Pública Local y de Planeación del Desarrollo, el diputado Federico Döring Casar advirtió que se debe ser cuidadoso en la selección del titular del Instituto de Planeación Democrática y Prospectiva de la Ciudad de México, para que no llegue una persona vinculada a los grupos inmobiliarios.

“El perfil debe ser de suficiente solvencia técnica y profesional, también sensibilidad social para concertar y no ser un déspota ilustrado que quiera imponer su conocimiento y su visión de ciudad sin suficiente capacidad para escuchar lo que el vecino opine”, agregó el legislador integrante del grupo parlamentario del PAN.

En esta mesa participó Ángel Pérez Palacios, maestro en urbanismo por la Universidad de Morelos, quien recordó que la creación del Instituto es un esfuerzo de las autoridades ante la urgencia de crear organismos para la planeación de la urbe, ya que el suelo urbano y de conservación con que cuenta la ciudad se han ocupado de manera desordenada, “llegando a escenarios lejanos del equilibrio en el uso de servicios, y en donde la especulación inmobiliaria y el negocio desplazan al concepto de prestación de servicios”.

Gabriela Quiroga García, especialista en Urbanismo por la Facultad de Arquitectura de la UNAM, comentó que por desgracia el crecimiento urbano en la Ciudad de México se atrasó porque todavía no hay evaluación del desarrollo. “Definitivamente la ciudad debe tener un límite de crecimiento”, agregó.

Por su parte, Adolfo Sánchez Almanza, catedrático en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, consideró que el Instituto de Planeación Democrática y Prospectiva de la Ciudad de México será una figura de planeación positiva “ya que se encargará de hacer estudios del funcionamiento real de la Zona Metropolitana del Valle de México y las entidades que integran la Megalópolis, por lo que será muy importante la perspectiva que se haga a largo plazo, ya que, desgraciadamente, en México solamente pensamos a tres o seis años”.

En su ponencia, José Primo García Peña, director de Planeación del Instituto Municipal de Planeación de León, Guanajuato, indicó que para el caso de la Ciudad de México, por ser una urbe grande, “se debe estar alineados a una nueva agenda urbana que implica ciudades compactas, sostenibles, seguras y resilientes, así como participativas, en donde exista mayor convivencia social en prevención”, concluyó.