• Esta Red surge sobre todo del trabajo realizado en el V Encuentro de discusión y análisis de estrategias e intervención a la violencia por razones de género en las IES.

Por: Redacción/

La Red Reconstruir contra la Violencia de Género es el resultado de años de trabajo en conjunto entre organizaciones e instituciones de educación superior (IES), que en el caso de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) se alberga en la Defensoría de los Derechos Universitarios (DDU), explicó su titular María Guadalupe Huacuz Elías durante los Siete días de activismo contra la violencia por razones de género.

Hace poco menos de un año el Colegio Académico de la Casa abierta al tiempo aprobó –en la Sesión 488– las políticas transversales para erradicar la violencia por razones de género, una de las cuales establece el fomento de la creación de redes institucionales e interinstitucionales para la atención y el seguimiento de casos del tipo.

Esta Red surge sobre todo del trabajo realizado en el V Encuentro de discusión y análisis de estrategias e intervención a la violencia por razones de género en las IES, que se llevó a cabo los días 6 y 7 de septiembre y cuya misión es acompañar a las víctimas de violencia para fomentar espacios de equidad entre los géneros en instituciones universitarias y trabajar bajo principios de ética feminista.

La UAM tiene uno de los primeros doctorados en estudios feministas en el país reconocido como de excelencia académica, lo cual brinda los elementos teórico-metodológicos para hablar de una ética feminista. “Creemos en la sororidad, es decir, en la solidaridad entre mujeres frente a situaciones de violencia por razones de género, así como en el respeto, la responsabilidad y el autocuidado”, afirmó la doctora Huacuz Elías.

La Red es una suerte de búsqueda en colectivo que –a través de reuniones mensuales y grupos de trabajo– ha establecido los objetivos que guiarán cada eje de actuación, entre los cuales están una clínica jurídica; asesoría virtual y canalización; comunicación asertiva, denuncia pública y acompañamiento; intercambio de experiencias y formación especializada, además de un observatorio.

La clínica jurídica toma acciones a través de la investigación sobre la función y alcances en relación con la violencia de género en las universidades: diseñar recursos humanos y materiales necesarios con formato horizontal, constituir en su momento alianzas estratégicas, y hacer una búsqueda y perfil de casos. Esta clínica estará liderada por el doctor Arturo Sotelo Gutiérrez, defensor adjunto de la DDU.

La asesoría virtual y canalización es encabezada por la doctorante Elizabeth G. Cervantes, y tiene como objetivo aconsejar, informar, acompañar, canalizar y dar seguimiento a personas víctimas de cualquier tipo de violencia en las IES.

El eje sobre intercambio de experiencias y formación especializada es coordinado por Carolina Zenteno y pretende tender lazos comunicativos entre universidades para recabar información y crear mecanismos eficaces que procuren una retroalimentación entre la comunidad universitaria, a través de herramientas como foros digitales, conferencias, comunidades digitales, seminarios, entre otras.

La comunicación asertiva, denuncia pública y acompañamiento, a cargo de Steffany Mora Nieto, se encarga de discutir y, en su caso, realizar comunicados y pronunciamientos en temas relacionados con la violencia por razones de género en las IES.

El observatorio lo lidera la doctora Alma Rosa Pizano y se ha fijado entre sus acciones establecer el seguimiento de los casos más emblemáticos dentro de las universidades, analizar los mecanismos de eficiencia para realizar los diagnósticos, cartografiar las IES y desarrollar la metodología de trabajo interno, entre otras.

El doctor José Mariano García Garibay, rector de la Unidad Lerma, destacó la conformación de la Red Reconstruir y consideró fundamental tejer estas conexiones entre diferentes instituciones de educación superior.

La UAM ha hecho esfuerzos importantes por tratar de erradicar la violencia de género en esta casa de estudios, pero reiteró la importancia de sumar voluntades con otras instituciones. “Seguimos trabajando en políticas transversales y se ha avanzado en la constitución de protocolos”, puntualizó.

La doctora María de los Ángeles Garduño, miembro de Cuerpos que Importan – colectivo que ha realizado aportaciones importantes para contribuir a generar un impacto que visibilice la violencia de género en la Unidad Xochimilco y en todas las universidades– expuso que una de las acciones más importantes ha sido el Foro contra el Acoso para estudiantes de primer trimestre, en el que se analiza el tema y se dan a conocer las herramientas con las que cuenta la UAM para la erradicación de este tipo de violencia.

La doctora Raquel Güereca Torres, titular de la Coordinación de Bienestar Universitario y Género en la Unidad Lerma, sostuvo que el espacio universitario es un sitio de poder que impacta las relaciones entre los diversos actores que están dentro de ella –donde se van tejiendo estas interacciones de género que están regidas por la cultura patriarcal– y la Red develará las desigualdades a partir de investigaciones y estudios.