Por: Meztli Islas
En su iniciativa para proteger los derechos laborales de médicos residentes y prestadores de servicios social de profesiones de salud, la senadora Silvia Garza Galván calificó como un trabajo fundamental para el desarrollo de las capacidades el que éste sector laboral lleva a cabo.
Dijo que ésta protección sirve –entre otras cuestiones- para satisfacer las necesidades materiales del ser humano. Su distribución y duración, es uno de los elementos más importantes para el desempeño de las funciones y la vida familiar del trabajador, por lo que un mal diseño de tiempo de la jornada laboral puede causar numerosos problemas de tipo físico, psicológico y emocional.
Señaló también que “el trabajo se debe realizar respetando los principios y derechos laborales fundamentales; encontrando que la duración de las jornadas en algunas actividades como en el caso el internado de pregrado y la residencia médica puede llegar a ser hasta de 36 horas continuas”, lo que genera problemas fisiológicos y altera drásticamente las fases de trabajo, comida y sueño, lo que provoca modificaciones en el ritmo natural de muchas funciones corporales y genera una considerable disminución en las actividades familiares y sociales.
“La residencia médica y el internado de pregrado son actividades en donde se necesita dedicación completa, ya que se debe actuar de forma eficaz, eficiente y oportuna en las situaciones tan delicadas que se les presentan, lo que genera un alto contenido de estrés. Aunado al estrés causado por la propia actividad que realizan se debe considerar las altas horas de guardia que deben cumplir dichos médicos, lo que puede provocar desde alguna negligencia médica hasta provocarse ellos mismos daños cognitivos, cerebrales, males cardiacos, hipertensión, diabetes e inclusive depresión.”
Señaló que la intensión de la iniciativa es proponer la reducción de la jornada de los médicos
a ocho horas, para favorecer la intensidad de trabajo y reducir espacios que pueden generar una carga negativa en el ambiente. También se pretende coadyuvar a una mejor calidad de vida del médico en formación, lo que igualmente causará un aumento en su productividad.
La también presidenta de la Comisión de Cambio Climático y Calentamiento Global dijo que “El trabajo de ocho horas contribuye a estabilizar un modelo de desarrollo que pone al centro a la persona humana y genera un mejor trabajador” dijo, además que espera que el Senado apoye a ésta noble iniciativa.