Por Roberto Barco Celis

“A nueve años de haber sido aprobada la interrupción del embarazo en el Distrito Federal, hoy Ciudad de México, la realidad ha dejado de manifiesto que se trata de un tema de salud pública que tiene como objetivo principal evitar muertes de mujeres como consecuencia de una mala práctica, así como por el derecho a decidir sobre su propio cuerpo. Por esta razón, necesitamos avanzar a nivel nacional y no tener miedo a aprobar esta iniciativa”, afirmó la Diputada Maricela Contreras Julián, del Grupo Parlamentario del PRD.

En la LXIII Legislatura del Congreso de la Unión se presentará una iniciativa que reformaría la Ley General de Salud así como diversas disposiciones del Código Penal Federal para que la Interrupción Legal del Embarazo sea una opción para las mujeres en todo el país, proporcionada por las instituciones de salud de las entidades federativas y de seguridad social, tales como el Instituto Mexicano del Seguro Social, el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, el Instituto de Seguridad Social para las Fuerzas Armadas Mexicanas.

“La iniciativa pretende ampliar los excluyentes de responsabilidad, como las establecidas en el Código Penal Federal para establecer el límite de las 12 semanas de gestación para realizar una interrupción del embarazo, así como de la Ley General de Salud, relativas a los prestadores de servicios que una vez establecida la urgencia de la interrupción del embarazo no se podrá invocar la objeción de conciencia, por lo que será obligación de las instituciones públicas de salud, garantizar la oportuna prestación de los servicios antes referidos y contar con prestadores de servicios de salud no objetores de conciencia”, explicó la integrante de la Comisión Derechos Humanos.

Contreras Julián dio a conocer que, según datos del Grupo de Información en Reproducción Elegida, reportan que desde abril 2007 hasta marzo 2016, se han realizado 156 mil 964 procedimientos de Interrupción Legal del Embarazo (ILE), de las que 9,838 fueron realizadas a menores de 18 años y 6.27% de mujeres provienen de la Ciudad de México.

Por su parte, la más reciente Encuesta Nacional de Salud y Nutrición realizada en 2012, sitúa a México por arriba del promedio mundial en la tasa de abortos en las mujeres de entre 15 y 24 años de edad, reportando 33 abortos por cada mil embarazos mientras el promedio en el mundo es 29 por cada mil.

Del total de abortos en el país, alrededor de 44 por ciento corresponden a adolescentes entre 15 y 19 años, en tanto que el porcentaje restante lo ocupan mujeres de 19 a 24 años, aunque también se presenta ligeramente en quienes ya rebasaron esa edad.

“Es necesario garantizar el pleno acceso a este derecho tanto en clínicas privadas como en públicas, a través de la prestación de servicios de calidad, eficiencia y sin trabas que permitan a las mujeres decidir de manera libre y oportuna si deciden ser madres o no”, afirmó la diputada Maricela Contreras Julián.

En ese sentido, la propuesta que se somete a consideración, parte de una visión integral para reformar diversos ordenamientos que concurren en el tema que estamos abordando y es impulsada por dos factores fundamentales; el primero es fomentar la autonomía de las mujeres para tomar sus propias decisiones, bajo el principio de lograr que las mujeres cuenten con el derecho y la oportunidad de tomar sus propias decisiones en todo lo relacionado con su cuerpo y su salud.

“Así pues, no se trata de despenalizar el aborto, sino de reconocer el derecho que cada mujer tiene para decidir de manera libre sobre su cuerpo y reconocer que el derecho a la salud de las mujeres entraña el derecho a acceder a los servicios médicos de calidad, de manera gratuita y eficientes, sin discriminación de ningún tipo, a efecto de salvaguardar su integridad física y su vida; además de tener acceso a los programas de prevención para su salud, a una educación sexual y planificación familiar adecuadas, en el ejercicio de sus derechos de salud sexual y reproductiva.”, concluyó.