Por: Redacción

Para evitar el condicionamiento del voto a favor de algún partido, debe prohibirse el uso de teléfonos celulares y otros aparatos digitales portátiles dentro de las casillas donde las personas emiten su voto, pues con ello los votantes no podrán fotografiar el sufragio para demostrar que votaron por un instituto político en particular y a cambio ser beneficiados con programas sociales, manifestó la diputada Blanca Margarita Cuata Domínguez.

“La búsqueda de la democracia perfecta debe continuar. Para buscar la estabilidad política, económica y social de país, es necesario salvaguardar el derecho a votar de una manera libre, secreta y directa, sin que medie coacción o coerción para su ejercicio a través de la compra de votos y lo que ello implica”.

La legisladora federal de Morena presentó, el pasado 25 de abril, una iniciativa para reformar los Artículos 85 y 278 de la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales, con el fin de que los electores puedan emitir con libertad su voto y abonar a la democracia nacional.

En su propuesta, señala que en los comicios más recientes celebrados en México entre 2012 y 2016 se han documentado diferentes tipos de irregularidades en la esfera electoral que trastocan el ejercicio democrático del país.

“Como ejemplos están las maniobras ilegales provenientes de los partidos políticos para sumar votos a su favor, o bien las acciones desestabilizadoras y violentas desencadenadas por grupos disruptivos y del crimen organizado en lugares donde se celebran elecciones”.

Resalta que acciones como exigir a los votantes una fotografía de su voto, va en detrimento de la democracia, pues no sólo se atenta contra el voto libre y secreto, sino además genera abstencionismo y con ello un aumento en el costo por voto emitido.

De acuerdo con el texto de Cuata Domínguez, nuestro país tiene un sistema democrático que no termina de instaurarse, lleno de contradicciones y costumbres heredadas del pasado autoritario, que no permiten albergar valores y nuevas reglas en pro de la sociedad.

Considera que si bien el Instituto Nacional Electoral (INE) ha desempeñado un papel relevante como árbitro electoral, todavía no se han podido erradicar algunas prácticas políticas que dañan el sufragio efectivo.

En ese sentido, resalta que en México se invierte un sinfín de recursos financieros, humanos y materiales para la realización de los procesos electorales, pero que lamentablemente no se garantiza el ejercicio del voto de los mexicanos, ya que existen personas que se dedican a detectar vacíos en las leyes para burlar a las autoridades y que algunos partidos alcancen sus objetivos.

“Basta recordar lo escandaloso que han sido los actos de coacción del voto en procesos electorales, como la entrega de tarjetas de centros comerciales o de instituciones bancarias o tarjetas operadas por casas de bolsa, y los por demás lastimosos actos comprobados de utilización de recursos pertenecientes a diversos programas sociales que son enfocados a grupos vulnerables y que las dependencia de gobierno condicionan para coaccionar a ese segmento de población aprovechándose de la necesidad de los más desprotegidos de nuestro país”.