Por: Redacción/ 

A 20 años de la gesta democratizadora del Grupo Oaxaca, impulsor de la primera ley de transparencia en el país, el derecho de acceso a la información se ha transformado, de modo paulatino y con no poco esfuerzo, en una herramienta para el ejercicio de otras libertades y derechos fundamentales, afirmó el Comisionado Presidente del Instituto de Transparencia, Acceso a la Información Pública, Protección de Datos Personales y Rendición de Cuentas de la Ciudad de México (INFO CDMX), Julio César Bonilla Gutiérrez.

Durante la presentación virtual del libro “La agenda democrática del Grupo Oaxaca: balance y futuro”, Bonilla Gutiérrez reconoció que la obra es un recuento no sólo del camino andado en materia de transparencia, sino un reconocimiento de las tareas pendientes y avances que deberán darse en un momento de transición tecnológica, siempre garantizando a las personas la protección más amplia.

“El camino del acceso a la información no se ha terminado, no habrá de concluir. Como todo derecho humano, debe ser expandido en su concepto, alcances y límites, a la luz de las nuevas tecnologías y avances científicos de todo tipo”, refirió el Comisionado Presidente del INFO CDMX.

Dijo que el éxito de la estrategia social del Grupo Oaxaca radicó no sólo en el impulso y organización para introducir en la agenda política la generación de una muy necesaria regulación en materia de acceso a la información pública, sino en el modo en el que este grupo de personas supo, pudo y quiso recoger y agrupar las demandas, reclamos y molestias sociales para traducirlas en promesas y expectativas definidas en un discurso jurídico no sólo solvente sino, sobre todo, legítimo.

Reconoció que hoy en día el poder de la información es incuestionable, ya que es un bien intangible cuyo impacto trasciende el ámbito de las relaciones políticas, los mecanismos de ejercicio del poder, que puede transformar los pesos y contrapesos dentro de cualquier tipo de institución y organización humana. “Poseerla, tener la capacidad de acceder a ella, comunicarla, difundirla y utilizarla, forman parte de libertades construidas a partir de luchas sociales que han durado siglos”.
Bonilla Gutiérrez reconoció la labor de Juan Francisco Escobedo, Jorge Islas López, Issa Luna Pla, Salvador Olimpo Nava, Roberto Rock, Luis Ernesto Salomón y Jenaro Villamil, todos integrantes del Grupo Oaxaca.

En la presentación editorial de la obra, la Comisionada Ciudadana del INFO, Marina San Martín Rebolloso, afirmó que, en cada uno de los ensayos del libro, se descubren diversas visiones de una misma historia: la de un grupo ciudadano que logró sembrar una semilla de un derecho fundamental, que germinó y se transformó en un enorme árbol, que ha tardado mucho en crecer y que aún falta consolidar.“A quienes nos corresponde hoy ser sus guardianes, tenemos el deber ético y la responsabilidad social de protegerlo para que no sólo se mantenga en pie, sino que siga dando frutos”, enfatizó.

Refirió que los órganos constitucionales autónomos de transparencia y datos personales tienen muchos retos por delante, entre los cuales se encuentra, perfeccionar su operación y desempeño, como lo deben hacer todas las instituciones, sin que ello implique tocar su autonomía.

La Comisionada San Martín destacó que la autonomía permite a dichos órganos cuidar con efectividad el crecimiento del árbol del saber ciudadano, que tanto ha costado levantar, que resguarda a la ciudadanía de tormentas de opacidad, resistiendo los embates contra la apertura.

“La autonomía conserva los balances del poder, y es gracias al equilibrio que mantiene, que se fortalecen todas las instituciones del Estado”, puntualizó.
Aseguró que hacer memoria de los acontecimientos del pasado permite a las instituciones garantes de derechos ser conscientes del presente, y capaces de proyectar el futuro que debe construirse en beneficio de las personas, a quienes se deben.

En su intervención, el Comisionado Presidente del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), Francisco Javier Acuña Llamas, afirmó que el libro es un recuento de las hazañas del Grupo Oaxaca, es tributario de acciones previas que abrieron un camino que se inscribió en la Constitución al establecer el derecho a la información.

Destacó esa experiencia como un revulsivo parlamentario, que algunos consideran el primer ejercicio de parlamento abierto en la etapa contemporánea. Al recordar que formó parte del equipo de apoyo del Grupo Oaxaca, Acuña Llamas mencionó a algunos precursores y actores de ese entonces, como Rosana Fuentes Berain, Fidela Navarro, Dora Angélica de la Rocha y Beatriz Solís Leere. Para Blanca Lilia Ibarra Cadena, Comisionada del INAI, el libro es una oportunidad para debatir y analizar la memoria del derecho a saber, para posicionarlo en el primer plano de la agenda política nacional.

Refirió que la relevancia política de la labor del Grupo Oaxaca radica en que sus estrategias, acciones y objetivos no sólo respondían a una exigencia ciudadana, sino que también consolidó la primera experiencia exitosa de un grupo ciudadano ante el Poder Legislativo.

Al mencionar que la Ley General de Transparencia de nuestro país es considerada como la segunda mejor legislación del mundo, Ibarra Cadena dijo que la agenda de la transparencia y el acceso a la información tiene miras de largo aliento, por lo que no debemos dejar de apuntalarlas como herramientas en nuestro régimen democrático.
Jorge Islas López, Cónsul general de México en Nueva York y coautor de la obra, reconoció la labor y conjunción de esfuerzos de quienes formaban el Grupo Oaxaca, porque en aquel momento no había especialistas en la materia, ni literatura del tema ni muchos menos un andamiaje administrativo.

Afirmó que el Grupo Oaxaca fue una “piedra de toque” de lo que se conoce como democracia deliberativa, ya que tuvo un amplio consenso y una amplia pluralidad que redundaron en reformas institucionales y en el actual andamiaje institucional, además de que estableció dos precedentes adicionales: la iniciativa popular o ciudadana y el parlamento abierto.

Por su parte, Rosa María Cruz Lesbros, Presidenta del Comité de Participación Ciudadana del Sistema Nacional Anticorrupción, dijo que los trabajos del Grupo Oaxaca fueron un ejemplo de las buenas prácticas, de cómo se juntaron todos los elementos para alcanzar principios mínimos y máximos en la entonces creada Ley Federal de Transparencia.

El Grupo Oaxaca -añadió- aprovechó la coyuntura, el momento de que estábamos partiendo de una apertura democrática y no sólo se quedó en un ejercicio académico, sino que terminó en la creación de la legislación reglamentaria del artículo sexto Constitucional.
Por último, Juan Francisco Escobedo, Director de Seguimiento de Cumplimientos del INAI y coordinador editorial de la obra, dijo que en el libro se incluyen ocho miradas que confluyen porque no hay una historia oficial del Grupo Oaxaca, son aproximaciones a su historia y a hechos históricos con el enfoque de los mosaicos.
Insistió en que el libro trata de recuperar el momento fundacional del Grupo Oaxaca, de quienes visualizaron las ideas que en ese momento se debatían, para entender lo que se hizo bien y lo que no.