Por: Redacción

Por su responsabilidad en la comisión de los delitos de homicidio y lesiones calificadas en agravio de dos hombres a quienes disparó con arma de fuego en calles de la colonia Estrella del Sur, delegación Iztapalapa, Eduardo Campos Pérez recibió de un Juez de primera instancia condena de 33 años y cuatro meses de cárcel gracias a las pruebas aportadas por la Procuraduría General de Justicia capitalina.

En la partida 99/2012, el Juzgador 16 Penal con sede en el Reclusorio Preventivo Oriente también impuso el pago de 47 mil 257 pesos por reparación de daños.

Las evidencias asentadas en el expediente comprobaron que el 21 de octubre de 2011 las víctimas se encontraban en compañía de otras personas, a bordo de un automóvil en el cruce de las calles Puente Titla e Ixmiquilpan, cuando se acercó Eduardo Campos y su cómplice –un menor de edad— para golpear la unidad con una botella de vidrio.

Luego de amenazar con matarlos si no se retiraban, su copartícipe accionó la pistola contra uno de los afectados, ocasionándole heridas en el tórax que le provocaron la muerte. Posteriormente, los imputados se dirigieron a otro de los ofendidos, al que también dispararon causándole afectaciones en el movimiento de las piernas.

Al tomar conocimiento de los ilícitos, el Ministerio Público de la Fiscalía Central de Investigación para la Atención del Delito de Homicidio reunió los elementos de prueba y recabó declaraciones de testigos, con lo que determinó consignar la indagatoria sin detenido.

El juez de la causa libró orden de aprehensión contra el agresor, por lo que agentes de la Policía de Investigación (PDI) cumplimentaron dicho mandato judicial y capturaron a Eduardo Campos Pérez, a quien trasladaron al reclusorio donde fue procesado y recibió la mencionada sentencia.

La presente información se emite en términos del Artículo 11 de la Ley de Protección de Datos Personales.

A través de estas acciones, la Procuraduría General de Justicia capitalina reafirma su compromiso por investigar y perseguir la comisión de los delitos de homicidio y lesiones, con el propósito de brindar certeza jurídica y confianza a los habitantes de la Ciudad de México.