Por: Redacción/

Los diputados del Partido Acción Nacional queremos saber quién dice la verdad sobre los depósitos entregados por la empresa Odebrecht al ex director de Pemex, Emilio Lozoya Austin. La justicia mexicana no puede ser ciega y sorda ante las evidencias y por ello le exigimos a la Procuraduría General de la República realmente ir al fondo del asunto, demandó el coordinador del Grupo Parlamentario del PAN, Marko Cortés Mendoza.

Dijo que a pesar de ser requerido por la PGR, Emilio Lozoya quiere dejar la percepción de que no pasa nada y que todo quedará en una anécdota más, pretendiendo que la justicia ignore lo evidente y prevalezca el poder de sus amigos influyentes, cuando está plenamente comprobado que en Brasil, Ecuador, Perú y Colombia si hay funcionarios públicos procesados por el mismo delito.

La PGR debe hacer bien su trabajo, demostrando con hechos que realmente quiere que se conozca la verdad y no como pareciera que pretende exonerar a los responsables de esta cadena de favores y corrupción de las empresas Odebrecht y OHL, dos empresas ligadas al más alto nivel en Pemex y en otras esferas del gobierno del Presidente Peña Nieto.

Hay que recordar que Emilio Lozoya fue ejecutivo de OHL, en el mismo tiempo era parte del equipo de campaña presidencial, hasta que fue nombrado por el candidato triunfante, Enrique Peña Nieto, a la Presidencia de la República, como responsable del área internacional de su equipo de transición, en 2012.

Luego de ser designado Director General de Petróleos Mexicanos, Lozoya Austin se llevó de la Dirección de Finanzas de OHL al más cercano de sus amigos, Mario Alberto Beauregard Álvarez para designarlo director de Finanzas de Pemex. Después, en abril de 2013, a cinco meses de haber iniciado el gobierno de Peña Nieto, Emilio Lozoya entregó el primer contrato a OHL, con la construcción de una planta de cogeneración de 35 megavatios de potencia en la refinería Francisco I. Madero, en Tamaulipas.

Asimismo, directivos de Odebrecht aceptaron ya, ante el Departamento de Justicia de Estados Unidos que sobornaron con 10.5 millones de dólares a funcionarios de una empresa estatal mexicana, no es difícil asegurar que se trató de PEMEX.

“Queremos conocer la verdad, que se aclaren los vínculos de los funcionarios públicos con las dos empresas privadas que han beneficiado con negocios poco claros a funcionarios de este gobierno. Los mexicanos estamos hartos de esta corrupción sin castigo, es tiempo de acabar con los escándalos que reducen la confianza y daña la imagen de nuestro país ante el resto del mundo”, expresó el líder parlamentario.

Marko Cortés dijo que hay episodios en esta administración que no debemos dejar de conectar con el presente. En octubre de 2013, el Presidente Enrique Peña recibió en privado a Marcelo Odebrecht, líder de la empresa, quien habló de su interés por intervenir en México en los sectores de petroquímica, saneamiento y energía hidráulica, producción de etanol, azúcar, energía renovable de biomasa, así como concesiones carreteras, pero tres años después el Departamento de Justicia de Estados Unidos descubrió el mega escándalo de corrupción y sobornos de esa empresa privada en diversas partes del mundo; nuestro país no es la excepción.

La exigencia de los diputados es muy clara: Que el Gobierno Federal, la Dirección General de Pemex, la Procuraduría General de la República, la Secretaría de la Función Pública y la Auditoría Superior de la Federación aceleren sus investigaciones hasta fincar responsabilidades y castigos a Emilio Lozoya, y a cualquiera de los ex funcionarios públicos que recibieron sobornos millonarios de la empresa Odebrecht y OHL.

“Aún estamos esperando el resultado de la denuncia que presentó el Grupo Parlamentario del Partido Acción Nacional en marzo del año pasado, ante la Auditoría Superior de la Federación por conducto del diputado Luis Marrón, contra Emilio Lozoya por el mal manejo de las finanzas al frente de Petróleos Mexicanos; la ASF no debe ser otra institución que se doble ante la corrupción”, finalizó.