Por: Redacción

La operación de una política de redes o vínculo entre las instituciones de educación superior y las instancias que ofrecen empleo facilitaría la inserción de los egresados universitarios en el mercado laboral, afirmó el maestro Pablo Yanes, coordinador de la Unidad de Desarrollo Social de la Comisión Económica para América Latina en México.

Durante su participación en la 3ra. Semana de política y gestión social –efectuada en la Unidad Xochimilco de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM)– el funcionario dijo que el proceso de incorporación laboral no es equitativo, pues la información tiene un alto grado de disponibilidad.

Sin embargo, la capacidad de interpretarla, analizarla y procesarla requiere de contar con “capacidades metodológicas adecuadas” que debieran cultivarse en el ámbito universitario.

“En ese sentido la universidad debe ofrecer a sus alumnos más formación que información”. Una sociedad educada favorece el desarrollo, por eso “estudiar siempre es bueno”, pero también se requieren mejores procesos de inserción a los mercados laborales.

Al dictar la Conferencia: Desafíos y reflexiones en la formación profesional de los estudiantes explicó que en la medida que la gente está más calificada, los ámbitos de empleo son “menos mercados y más redes”. En ese sentido, no necesariamente la capacidad de inserción se deriva de los conocimientos acumulados, sino de cómo construir una relación de vinculación activa con las posibles áreas que solicitarán los servicios de los profesionales.

Ese proceso “no pasa sólo por tener el currículum, sino también por los vínculos que van a hacer posible que las personas sean conocidas”, ya que cuando una instancia universitaria tiene un acuerdo sólido con alguna otra para que sus alumnos presten algún tipo de servicio social o desempeñen cualquier otra actividad, muchos de esos jóvenes logran incorporarse más adelante.

El maestro Yanes se refirió a la necesidad de que los egresados posean capacidades analíticas para enfrentar problemas y ofrecer soluciones, así como para “pensar fuera de los esquemas establecidos”.

El mercado laboral está sujeto a muchos procesos, pero desarrollar aptitudes para reflexionar, trabajar en equipo e incidir en la solución de problemas “cuenta mucho”.

El acceso a la información es enorme “pero si no sabemos buscar, jerarquizar ni discernir qué es relevante y qué no, cualquier cosa de Wikipedia parecerá de primer nivel”.

Para la obtención de esas habilidades resulta relevante crear en la universidad espacios colectivos de aprendizaje de las técnicas del debate y estar siempre en la disposición de cuestionar si lo que se piensa es correcto o si es necesario repensar o “reandar” el camino.

Todo esto se logra no sólo con el esfuerzo individual, sino mediante la interacción para aprender de manera conjunta a debatir, pues “creo que parte de la pobreza de nuestra vida pública tiene que ver con la pobreza de nuestra capacidad para debatir”; los estudiantes tienen que saber discutir, escuchar, rebatir y argumentar.

La 3ra. Semana de política y gestión social –organizada por la Licenciatura en Política y Gestión Social y el Departamento de Política y Cultura– fue inaugurada por el doctor Carlos Hernández Gómez, director de la División de Ciencias Sociales y Humanidades de la Unidad Xochimilco.