• La doctora Raquel Güereca enfatizó que no sólo se trata de hablar de paridad entre géneros, sino hay que nombrarlos explícitamente y definir cuáles son las desigualdades a eliminar.

Por: Redacción/

El anteproyecto de la Ley General de Ciencia, Tecnología e Innovación “omite mencionar a las mujeres, sólo habla de género sin incluir en el glosario lo que se entiende con esa definición”, precisó la doctora Raquel Güereca Torres, académica de la Unidad Lerma de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).

“En la propuesta se habla en abstracto de género, de igualdad de oportunidades para todas las personas en el artículo 51, equidad de posibilidades y acceso entre los géneros en el 97 y en el 116 no se usan los términos sexo, mujeres u hombres para establecer una relación de disparidad a erradicar”.

En la mesa de trabajo Perspectiva de género en la política científica, que reunió voces de académicas de instituciones públicas y privadas, enfatizó que no sólo se trata de hablar de paridad entre géneros, sino hay que nombrarlos explícitamente y definir cuáles son las desigualdades a eliminar.

“El tema está considerado solamente en 10 de los 128 artículos que conforman el anteproyecto que va generando mayores confusiones porque esa perspectiva requiere ser transversal y tener definidos con claridad cuáles serán los atributos de la nueva normativa”, dijo la responsable de la Coordinación de Bienestar y Género de ese campus de la UAM.

Entonces, “me parece muy grave que en la propuesta supongan que por ponernos entre los géneros consideren estar incluyendo a sectores históricamente relegados”, sostuvo en el Foro Interuniversitario Jornadas de reflexión sobre el sistema de Ciencia, Tecnología e Innovación que demanda el futuro.

Desde la perspectiva de género no se parte de cero, pues existe ya un desarrollo teórico y epistemológico a partir de las teorías feministas, lo cual implica que no es sólo poner las palabras puesto que “género es una categoría analítica para entender cómo están las desigualdades y de lo que se trata es transversalizar la política científica de tal manera que se pueda avanzar hacia la equidad, pero para lograrla se requiere de modelos de equidad y paridad, que son dos cosas diferentes”.

La segunda tiene que ver con la representación en los puestos de toma de decisión en las instituciones científicas o académicas mientras la primera estriba en los modelos elaborados para alcanzar la igualdad dentro de los espacios donde se construye el conocimiento científico.

“La perspectiva de género es cómo revisamos esa normatividad que nos rige para contribuir a que no se perpetúe la desigualdad presente entre hombres y mujeres”, dijo en este ejercicio que estuvo moderado por la doctora Olivia Gall Sonabend, académica del Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades (CEIICH) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

La profesora de la Unidad Lerma de la Casa abierta al tiempo precisó que la efectividad de la propuesta podrá ser reconocida cuando examine a aquellos grupos que han sido excluidos socialmente, sean hombres, mujeres o personas de la diversidad sexual que puedan acceder al conocimiento.

La doctora Leticia Rodríguez Segura, directora nacional de Innovación e Investigación Educativa de la Universidad Del Valle México (UVM), coincidió en que las concepciones constructivas y los principios rectores que se deben incorporar en las leyes para tener acciones concretas deben ser medibles, auditables y visibles en las universidades.

A manera de ejemplo, refirió que en el foro universitario 55 por ciento de los ponentes ha sido hombres y 45 por ciento mujeres, mientras que en el país siete de cada diez científicos son varones y sólo tres mujeres, en una población mundial constituida por 49.5 por ciento de personas del sexo femenino.

“No hace falta tener datos, sino ver operaciones concretas, como hacer que principios de inclusión, pluralidad, no discriminación, igualdad de género, imparcialidad y paridad estén en programas específicos en los centros de educación superior”.

La doctora María Elena Ramos Tovar, académica de la Facultad de Trabajo Social y Desarrollo Humano de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL), refirió que la perspectiva de género no se muestra en este proyecto, además que persiste una escasa participación de ellas en leyes federales y aún más en las estatales, “por lo que debemos apostar a una igualdad plena”.

La doctora María Eugenia Guadarrama Olivera, investigadora del Centro de Estudios de Género de la Universidad Veracruzana (UV), reveló que la científica en México seguirá quedando oculta mientras prevalezca una política patriarcal que limite su desempeño; en tanto que la doctora Lucero Aída Juárez Herrera y Cairo, docente de la licenciatura en Medicina de la UVM campus Hermosillo, convino que para construir una mejor ciencia se requiere transversalidad en las leyes.

En la mesa Perspectiva de género en la política científica también participaron las doctoras Tamara Martínez Ruiz, titular de la Coordinación para la Igualdad de Género, y Norma Blazquez Graf, profesora del CEIICH, ambas de la Universidad Nacional Autónoma de México; así como la doctora Sabine Mondié Cuzange, académica del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional.