Por: Javier Divany Bárcenas/

La coordinadora del PRD en la Cámara de Diputados, Verónica Juárez Piña, consideró grave la pretensión de diputados de Morena de reformar la Ley de Amparo para impedir al Poder Judicial proteger a la ciudadanía cuando sea objeto de actos autoritarios, por lo que demandó votarla en contra o mejor aún, retirarla del proceso legislativo.

La diputada perredista señaló que es otra muestra de la intensión del actual Gobierno y sus partidos aliados de “retorcer” la ley para ajustarla a los caprichos del presidente de la República.

Comentó que, en aras de una supuesta austeridad, esta intención de reformar la Ley de Amparo tiene particular dedicatoria, como para empleados y funcionarios de diversas dependencias.

Sobre todo, para quienes han solicitado la protección del Poder Judicial en contra de las decisiones arbitrarias de la autoridad, como ha sido para disminuirles sueldos a trabajadores, a quienes vieron vulnerados sus derechos con la desaparecieron de fideicomisos y también tiene dedicatoria para particulares que vieron vulnerados sus intereses con la reciente reforma a la Industria Eléctrica.

Afirmó que instancias del Poder Judicial han reconocido la inconstitucionalidad de las acciones del gobierno, por lo que al menos han suspendido provisionalmente su aplicación o su vigencia a través de la promoción de suspensión de amparos.

Lamentó que Morena, el gobierno y sus aliados pretenden eliminar el derecho de los ciudadanos a solicitar amparo mediante una reforma a la ley respectiva, lo que los dejaría en desamparo y a final de cuenta, un perjuicio contra la sociedad.

“Es otra muestra de que se quiere ajustar la ley a los caprichos del Presidente, tal como lo es también su anunciada intención de presentar una iniciativa de reforma constitucional, una vez que la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica que sus aliados en el Congreso le aprobaron, fue declarada inconstitucional”, señaló la jalisciense.

Calificó ambos casos a la vez como una falta de respeto del poder Ejecutivo al poder Legislativo y al mismo estado de derecho, ya que le impone al primero, a través de sus grupos parlamentarios, cambios indebidos a las leyes vigentes.

Dijo que, en cualquier caso, es otro ejemplo del autoritarismo que caracteriza al actual gobierno y a sus apoyadores en el Congreso de la Unión, quienes quieren ajustar las leyes a sus ocurrencias.