Por Redacción

16 de junio, 2016 — Este 16 de junio se celebra por segunda vez en la historia el día internacional dedicado a reconocer el enorme aporte y potencial de las remesas enviadas por los migrantes a sus familias. La fecha fue propuesta en 2015 por el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA).

Su objetivo central es animar al público en general y al sector privado en particular a hacer más para ampliar el impacto que esos envíos generan para el mundo en desarrollo.

Por años, los migrantes proveyeron de esos recursos a sus familiares sin que los gobiernos le prestaran debida atención. No obstante, en los últimos 15 años el volumen de esas contribuciones ha salido cada vez más a luz.

En ocasión de este día, el FIDA ofreció datos sorprendentes sobre ese flujo de capital.

Por ejemplo, señala que en 2015 casi 250 millones de migrantes económicos que viven fuera de sus países de origen enviaron unos 450.000 millones de dólares en remesas a sus familias.

Ese dinero representa con frecuencia más del 50% del ingreso de sus seres queridos y les permite abastecer necesidades básicas, como vivienda, salud y educación.

Además, entre el 30 y el 40% de las remesas son enviadas a las zonas rurales y muchos de los que las reciben las ahorran o invierten en pequeños negocios.

No obstante, más del 90% de las personas más pobres del mundo no tiene acceso a cuentas de ahorro, créditos, seguro o formas convenientes de transferir dinero.

En este sentido, el FIDA subrayó la importancia de proveer acceso financiero para que esos fondos generen un impacto positivo.