Por: Redacción/

Algunos aparatos de control o reglamentos inciden en la subjetividad de los niños que habitan en orfanatos, al moldear, conducir y gobernar sus vidas, señaló la licenciada Luisa Fernanda González Pastor Toledo, estudiante de la Maestría en Psicología Social de Grupos e Instituciones de la Unidad Xochimilco de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).

Muchos autores “creen que los niños carecen de capacidad de agencia o de actuar según su voluntad y se les considera sujetos débiles”, incluso las tesis de algunos de ellos sugieren que son adultos incompletos.

Debido a que esas ideas permanecen, sobre todo en instituciones de encierro, “me pareció relevante abordar este tópico”, resaltó la también egresada de la Licenciatura en Antropología Social de la Unidad Iztapalapa de esta casa de estudios.

En entrevista comentó que en su trabajo académico de posgrado se ha enfocado en hallar si existen mecanismos de resistencia que podrían estar ejerciendo los pequeños adscritos a esas residencias, así como las formas o acciones que emprenden en contra de su sometimiento.

En la Construcción de la infancia y regímenes de subjetividad en el Centro Amanecer para niños, investigación asesorada por el doctor Alejandro Ríos Miranda, González Pastor Toledo, analiza los perfiles de niños de entre 10 y 12 años de edad a partir de talleres lúdicos.

“El juego lo estoy usando como un factor psicoanalítico que permite conocer la experiencia de la subjetividad en los menores para saber si el aparato de control realmente está moldeando ese aspecto y si, al mismo tiempo, ellos están expresando algún tipo de resistencia”, apuntó.

Al presentar los avances de su investigación en el Primer Coloquio de investigación de la décimo segunda generación de la Maestría en Psicología Social de Grupos e Instituciones Intervención: dispositivo e implicación, refirió que su proyecto lo desarrolla en una institución de asistencia pública donde los infantes comparten en su encierro una rutina diaria administrada formalmente.

Poseen un reglamento –estandarizado para todas las casas del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia– que les dicta lo que deben hacer desde el momento en que despiertan hasta que se acuestan. Si bien son formas de control que se ejercen de manera inconsciente en los niños, son sometidos a una disciplina incesante.

“Necesariamente debe manifestarse algún tipo de resistencia, ya que de acuerdo con Michael Foucault si no la hay entonces se transforma en violencia. En este caso me interesa saber si lo que se está ejerciendo sobre ellos es algún tipo de intimidación o de poder”, indicó.

La licenciada González Pastor Toledo decidió dar continuidad a sus estudios previos sobre la construcción del Estado en las casas cuna de México, sólo que ahora “estoy abordando a esos mismos niños, pero desde un punto de vista psicológico, pues quisiera profundizar en las emociones y los comportamientos”, finalizó.