Por: Redacción/

La creación de la Coordinación de Innovación y Tecnologías Educativas (CITE) –que ofrecerá a la comunidad estudiantil opciones para la acreditación de las unidades de enseñanza aprendizaje en las modalidades no presencial y semipresencial– fue acordada por la Unidad Azcapotzalco de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).

La iniciativa fue anunciada en el Acuerdo 02/20 del rector de esa sede académica, doctor Oscar Lozano Carrillo, que también dio a conocer la modificación de la Oficina de Innovación y Emprendimiento para dar paso al Programa Economía 4.0.

Con base en el documento, la CITE tendrá como función central desarrollar las capacidades de gestión, formación e innovación educativa, permitiendo que parte de la oferta del campus se realice y consolide a través de medios virtuales.

El doctor Rafael Escarela Pérez, responsable de la CITE, explicó que la Universidad cuenta con herramientas en línea cuyo potencial puede utilizarse para que la docencia semipresencial y tradicional –denominada cara a cara– se beneficien también con herramientas digitales, tales como almacenamiento en la nube, videoconferencias y aulas virtuales, con el fin de estructurar un esquema que permita, de manera sistematizada, atender las necesidades académicas.

El investigador del Departamento de Energía de la Unidad Azcapotzalco dijo que uno de los objetivos específicos radica en apoyar la habilitación de los profesores en el ámbito digital para establecer mecanismos formales de educación a distancia.

En este momento de emergencia sanitaria, la Coordinación cumple con una función primordial, al haber creado la plataforma denominada http://contingencia.azc.uam.mx/ que brinda recursos en línea a la comunidad universitaria para que se mantenga activa en la investigación, la docencia y la preservación y difusión de la cultura, funciones centrales de la universidad.

La respuesta de los estudiantes “ha sido muy buena en términos de que se mantienen informados y acceden a muchas actividades”, además de que en las divisiones y en las coordinaciones de la Rectoría hay programados cursos en el mismo esquema.

Los profesores que así lo deseen pueden solicitar la apertura de aulas virtuales, “no con la intención de impartir una unidad de enseñanza aprendizaje todavía, pero –pensando que esta emergencia pueda continuar– sí con la posibilidad de llevar a cabo la instrucción a distancia de los cursos que así lo permitan”.

Un rasgo importante de la página de contingencia es que la Unidad Azcapotzalco fue la primera sede de la UAM en abrir una opción para las evaluaciones de recuperación y el sistema se mantiene disponible para cuando se requiera, es decir, docencia remota en emergencia.

La Institución visibiliza el suministro de todos sus recursos para que camine y no se estanque, por lo que la incorporación de expertos es relevante para que transmitan conocimiento a los académicos que no han trabajado en línea.

Una vez terminada la epidemia “buscaremos que esta labor no se detenga y que el docente que no conocía estas posibilidades sea creativo en la utilización de las mismas”, además de que se reforzarán los apoyos y el acompañamiento para quienes quieran integrarse a la educación virtual.

La plataforma se va a transformar para integrar acciones a través de las cuales “podamos fomentar entre alumnos y profesores, el gusto por este tipo de instrucción”.

Otro asunto importante será identificar a los grupos de investigación educativa de las tres divisiones para consolidar su trabajo en la sistematización de los dispositivos y la promoción de proyectos de indagación ante los consejos divisionales.

Antes de la pandemia del coronavirus COVID-19, la Universidad ya tenía una agenda para impulsar la modalidad semipresencial en las licenciaturas en Administración y en Ingeniería en Computación, un trabajo que el CITE busca consolidar, con preponderancia en este periodo.

La UAM avanza en sus esfuerzos y objetivos específicos de promover, mantener y mejorar en forma continua la plataforma y la organización para la práctica de la educación virtual, como proceso innovador basado en la tecnología que repercuta en una experiencia pedagógica de mayor calidad.

También busca mejorar y diversificar pedagógica y tecnológicamente las tareas docentes, así como alcanzar mayor calidad en los procesos de enseñanza-aprendizaje para fortalecer el modelo institucional de formación de profesionales, de acuerdo con las necesidades de la sociedad.

Para desarrollar estos objetivos, el CITE cuenta con la infraestructura adecuada, incluidos el Campus Virtual Azcapotzalco (CAMVIA), en el que se alojan las aulas virtuales de la Unidad; el espacio e-colaboración y todos los recursos accesibles de la Coordinación de Servicios de Información, la Biblioteca Digital UAM y los laboratorios virtuales, “que nos dotan de una capacidad importante para lograr los objetivos que nos estamos planteando”.