• No es posible predecir el surgimiento de virus por su condición multifactorial, pero sí anticipar la existencia de mutantes resistentes a los antivirales y prever los factores ecológicos que pueden facilitar epidemias futuras.

Por: Redacción/

La vacuna es una herramienta poderosísima y “necesitamos desarrollar más antivirales, pero al mismo tiempo debemos contar con las medidas de contención no farmacológicas: el uso de doble mascarilla, la distancia social y el confinamiento parcial, ya que no podemos detener el proceso de evolución, aunque sí controlar los daños por la aparición de nuevos patógenos”, aseguró el doctor Antonio Lazcano Araujo, miembro de El Colegio Nacional.

No es posible predecir el surgimiento de virus por su condición multifactorial, pero sí anticipar la existencia de mutantes resistentes a los antivirales y prever los factores ecológicos que pueden facilitar epidemias futuras, ya que conforme ha pasado el tiempo se ha visto cómo el número de estos fenómenos e infecciones que brincan de animales a humanos es cada vez mayor, ante la destrucción de selvas y por estar más en contacto con especies silvestres, como han mostrado las influenzas H1N1, SARS, aviar, así como Zika, VIH/SIDA, Ébola, Virus del Oeste del Nilo y ahora el SARS CoV-2.

El académico de la Facultad de Ciencias de la Universidad Nacional Autónoma de México destacó la labor de científicas que han contribuido al estudio de los coronavirus, entre ellas June Almeida, pionera en describirlos y ser reconocida por los avances que consiguió en virología hace medio siglo.

“Gracias a ella tuvimos los primeros reportes de los coronavirus, pues en 1966 recibió una muestra que –en el análisis inaugural al microscopio electrónico– reveló un tipo de patógeno distinto cuya imagen es similar a las coronas de los eclipses solares totales, lo que ahora conocemos como la proteína especular que juega un papel central en el ingreso de los gérmenes a las células”, señaló Lazcano Araujo en la conferencia magistral COVID-19: origen y evolución de una pandemia, efectuada en el marco del VII Congreso internacional avances de las mujeres en las ciencias, las humanidades y todas las disciplinas 2021, organizado por la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).

Katalin Karikó –bióloga molecular de origen húngaro– fue la primera en pensar en hacer vacunas de RNA mensajero –como las de Pfizer o Moderna contra el SARS-CoV-2– que pueden cambiarse muy rápido y trabajarse en el laboratorio sin grandes dificultades para su adaptación a distintas variantes, además de su potencial extraordinario para inhibir células, por ejemplo, cancerosas.

“También está Gertrude B. Elion, Premio Nobel y miembro de la National Academy of Sciences quien tuvo una idea que ahora es absolutamente esencial para contender con las infecciones virales: frenar la multiplicación de los patógenos”, expresó.

En la mesa Sostenibilidad, avances científicos y tecnológicos, moderada por la doctora Violeta Mugica Álvarez, académica del Departamento de Ciencias Básicas e Ingeniería de la Unidad Azcapotzalco y Profesora Distinguida de esta casa de estudios, El doctor Raymundo López Callejas habló del proyecto Análisis de la cinética de secado del sargazo en un secador solar del tipo indirecto, precisando que cada año casi un millón de toneladas de planta acuática llega al Golfo de México, con una desmedida cantidad de algas que puede tener usos potenciales como mejoradores de suelo –por su contenido de nutrientes– biocombustibles o alimento para ganado.

“La propuesta es que el sargazo sea aprovechado como energía térmica o bien en la riqueza de las superficies contaminadas, ya que tiene la capacidad de absorber niveles importantes de metales pesados”, afirmó el académico del Departamento de Energía de dicha sede académica.

Elena Carmona Carrera, ingeniera ambiental por la UAM y colaboradora del grupo de Restauración de Suelos del Departamento de Energía de la Unidad Azcapotzalco, expuso que el composteo es una tecnología viable para la biorrestauración de territorios con altas concentraciones de diésel.

Casi 80 por ciento “de la remoción empleando como cosustrato cáscara de plátano tuvo una eficiencia no muy alta, pero existe una abundancia del residuo en el país, mientras que 95 por ciento de eliminación con restos de champiñón registró una muy alta, aunque la disponibilidad es baja”.

La doctora Carmen Julia Navarro Gómez, integrante de la Junta Municipal de Agua y Saneamiento de Chihuahua, sostuvo que puede lograrse un uso sostenible de los recursos hídricos mediante la innovación tecnológica y la automatización en la generación de datos fundamentales para la toma de decisiones; la gestión de operación y distribución en la red; los indicadores de satisfacción de la demanda; la determinación del porcentaje de fugas, y control activo de éstas, así como en infraestructura.