Por: Redacción

Antes de sufragar este próximo 4 de junio para elegir a su gobernador, los mexiquenses deben evaluar objetivamente, con base en sus propias vivencias, cuánto de lo prometido por los candidatos priistas se ha cumplido y cuánto ha sido pura demagogia para engañarlos, obtener su voto y volverlos a saquear, afirmó el diputado Omar Ortega Álvarez.

El Coordinador de Proceso Legislativo del GPPRD en la Cámara de Diputados puso como ejemplo de esa demagogia y defraudación de la confianza ciudadana por parte de los priistas la nueva revelación en algunos medios de comunicación (Reforma, 220517) según la cual al menos seis hospitales han sido presupuestados desde 2015, año en que se concluirían y, sin embargo, siguen en obra negra.

Se trata –dijo el parlamentario perredista- de una burla semejante a la perpetrada por Javier Duarte de Ochoa en Veracruz, Roberto Borge en Quintana Roo, César Duarte en Chihuahua, los hermanos Moreira en Coahuila y Roberto Sandoval Castañeda en Nayarit, entre otros, en agravio de la población a la que primero le piden el voto con promesas y luego traicionan con malversación de recursos públicos, incluso con los destinados a servicios básicos, como salud.

De acuerdo con la información referida, Eruviel Ávila Villegas, gobernador del Estado de México, anunció en enero de 2015 la construcción y puesta en operación ese mismo año de siete hospitales generales en diversos municipios del Valle de México, gracias a un presupuesto de 779 millones de pesos.

Sólo el nosocomio de Chiconcuac fue inaugurado en enero del siguiente año, mientras que cuatro (los de Acolman, Chicoloapan, Coacalco y Zumpango) siguen en obra negra y los otros dos (los de Tepotzotlán e Izcalli) están abandonados.

Omar Ortega refirió que desde octubre pasado, con motivo de la presentación del Quinto Informe de gobierno de Ávila Villegas, denunció este abandono de obras, a la que se le sumaban la negligencia, insuficiencia de medicamentos, falta de personal y hasta maltrato a la población en la prestación del servicio en los centros de salud que en ese entonces operaban.

La desatención era particularmente grave en el Hospital Regional Las Américas, en Ecatepec; en el Hospital Regional de Alta Especialización, en Zumpango, y en el Hospital de Zentlalpan, donde incluso se negaron servicios de hemodiálisis porque las instalaciones se prestaron a una productora para la grabación de un capítulo de la telenovela “El Señor de los Cielos”.

“El candidato priista a suceder al actual gobernador, Alfredo del Mazo Maza, promete los mismos y otros beneficios a los mexiquenses que Eruviel Ávila, pero lo cierto es que también su credibilidad está en cuestionamiento si consideramos que está implicado en un fraude a Banobras, del cual fue director, y en “lavado de dinero” para financiar ilícitamente su propia campaña electoral”, dijo el legislador perredista.

Recordó que a principios de este mes propuso a la Comisión Permanente del Congreso de la Unión exhortar a la Procuraduría General de la República a que informara cómo iban las investigaciones sobre el desfalco por casi dos mil millones de pesos perpetrado contra las finanzas de Banobras durante la gestión de Del Mazo Maza.

Argumentó entonces que parte de este fraude fue por un préstamo de 99 millones 400 mil dólares a pesar de la falsedad de una póliza presentada por la empresa beneficiaria, Rodisa, uno de cuyos accionistas era Óscar Fernández Luque, dirigente del Sector Popular del PRI y director de Desarrollo Social de Huixquilucan cuando Del Mazo fue su presidente municipal.

Otra parte del fraude a Banobras fue a través de un financiamiento a Grupo Higa para la construcción de la autopista Toluca-Naucalpan. “Grupo Higa –señaló Ortega- ha estado involucrado en diversos escándalos con el gobierno mexiquense desde que Enrique Peña Nieto era gobernador del estado”.

“Así, pues, ¿cómo confiar nuevamente en los priistas si una y otra vez, en todo lugar donde se ubican, defraudan la confianza? ¿Vale la pena que los mexiquenses, los coahuilenses, los veracruzanos y los nayaritas se arriesguen a otros seis años de saqueo con la consecuente afectación a las finanzas públicas y a la calidad de vida por las mismas mentiras de siempre?”, cuestionó Ortega, quien se respondió: “Nosotros creemos que no”.