Por: Redacción

Conocida también como rosa de Abisinia, la jamaica es una flor de color rojo, originaria de África y que se utiliza principalmente en la gastronomía.

Sus flores (cálices) son la parte de mayor utilidad e importancia socioeconómica, ya que a partir de estos se elaboran bebidas, por ejemplo, nuestra tradicional agua de jamaica, dulces, diferentes tipos de salsas, mermeladas, concentrados, té y licor. Son además una fuente potencial de colorantes, saborizantes de alimentos, productos cosméticos y farmacéuticos.

La planta de esta fruta se desarrolla mejor en regiones con clima tropical y subtropical y su cultivo se realiza en la época primavera-verano, al iniciar la temporada de lluvias; mientras que su cosecha en los meses de octubre y noviembre. Asimismo, su comercialización, en granel (sin empaquetar) y el resto en extractos y mermeladas, se lleva a cabo entre diciembre y marzo.

En Guerrero, entidad en la que más se produce, se cultiva a manera de tradición cultural; principalmente en los municipios de Tecoanapa, Ayutla, Juan R. Escudero y San Marcos. Es igualmente un producto de gran demanda comercial en el mercado nacional e internacional, gracias a sus diversas utilidades culinarias.