• La CMDPDH informó que la Fiscalía de Chihuahua reconoció que la desaparición de Muñoz Guzmán fue desaparecido por miembros del Ejército, por lo que remitió la competencia de este caso a la FGR por tratarse de autoridades federales.

Por: Oscar Nogueda/

A dos años de que  la Fiscalía  Especializada en Investigaciones de los Delitos de Desaparición Forzada, perteneciente  a la  Fiscalía General de la República (FGR), asumió la investigación de la desaparición forzada de Miguel Orlando Muñoz Guzmán, la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos (CMDPDH) manifestó su preocupación por la falta de acciones para sancionar a los responsables.

Además, precisó que la Fiscalía especializada ignoró la investigación de las autoridades locales, por lo que abrió otras líneas de investigación distintas a la hipótesis de participación de elementos del Ejército mexicano en este hecho.

La CMDPDH informó que la Fiscalía de Chihuahua reconoció que la desaparición de Muñoz Guzmán, militar mexicano, fue desaparecido por miembros del Ejército, por lo que remitió la competencia de este caso a la FGR por tratarse de autoridades federales.

Después de 26 años , la fiscalía estatal aseguró que el ejército mexicano manipulo las investigaciones para evitar la acreditación de este ilícito, sin embargo, las autoridades ministeriales aseguraron que la evidencia disponible permite acreditar la desaparición forzada de Muñoz Guzmán.

Miguel Orlando Muñoz Guzmán ingresó, a sus quince años, al Heroico Colegio Militar. Posteriormente, ascendió al grado de Teniente de Infantería del 26 Batallón de Ciudad Juárez, Chihuahua.

El 8 de mayo de 1993, Muñoz Guzmán fue aceptado en la Escuela Superior de Guerra, sin embargo, no volvió a comunicarse con su familia.  A partir de ese momento, los familiares del militar comenzaron las acciones de búsqueda, no obstante, sufrieron amenazas y hostigamiento por parte de elementos castrenses.

“El Ejercito, desde un inició, intentó desviar las investigaciones, argumentando que Miguel Orlando había desertado y viajado a Estados Unidos, versión que fue desmentida al comprobarse que un elemento del Ejército había falsificado la firma de Miguel Orlando en el documento con el que pretendían demostrar su supuesta decisión de desertar”, indicó la CMDPDH.

A pesar de que la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH) ordenó al Estado mexicano a investigar este delito y sancionar a los responsables, la Comisión Mexicana destacó que la FGR no cumplido con este mandato internacional, revictimiza a las víctimas y ha mantenido por 30 años la impunidad en este caso.