Por: Redacción/

En 30 años de historia de reformas, cambios y transformaciones, la permanencia de un Padrón Electoral sólido y confiable para la ciudadanía ha sido una constante del Instituto Federal Electoral (IFE) y del Instituto Nacional Electoral (INE), coincidieron especialistas y funcionarios electorales.

Durante la mesa temática “El Padrón Electoral”, el presidente de la Comisión del Registro Federal de Electores, Uuc-kib Espadas, reconoció que hoy en día existe una gran fortaleza y confiabilidad no sólo del Padrón Electoral, sino también de la Credencial para Votar con Fotografía.

“Lo cierto es que estos años, estos 30 años del IFE-INE, han representado, entre otras cosas, un gran instrumento de identidad que nos garantiza que una mexicana o un mexicano, solamente ellos, podrán depositar su boleta y nadie podrá utilizar su identidad para votar de manera distinta”, dijo.

Ante los grandes avances y la consolidación que se ha alcanzado, consideró que hay poco para avanzar en el perfeccionamiento de este instrumento, aunque anticipó un esbozo de lo que podría ser una discusión para incluir la militancia partidista en la base de datos, como una forma de contrarrestar la indebida afiliación.

En su oportunidad, Arturo Sánchez, ex Consejero Electoral, destacó que a pesar de la gran cantidad de cambios, reformas y nuevas composiciones que se han tenido a lo largo de estas tres décadas, la Credencial para Votar con Fotografía se ha mantenido como la principal fortaleza del Registro Federal de Electores.

Agregó que durante este periodo se han concretado al menos cinco reformas y han existido críticas hacia la autoridad electoral, sin embargo, ninguno de estos elementos han minado la confianza de la ciudadanía en la credencial.

Recordó que otro de los grandes triunfos que se tuvieron ha sido la batalla que libró la autoridad electoral para garantizar la autonomía de esta base de datos, así como los avances tecnológicos que han acompañado la evolución de esta herramienta.

“Esta defensa por la autonomía, este desarrollo de la tecnología y la vinculación con la ciudadanía son los grandes aciertos de la historia del IFE- INE. Fue una batalla ganada a pulso para que el ciudadano pudiera seguir confiando en el padrón”, señaló.

Frente a ello externó su preocupación a que desde el poder se menosprecie a una institución que otorga dicha credencial y que en el afán de transformación se pudiera violentar las garantías de equidad en la contienda, así como la certeza y credibilidad de quien maneja la información de los ciudadanos.

Por su parte, el ex director del Registro Federal de Electores del entonces IFE, Juan Manuel Herrero relató uno a uno los momentos que se vivieron para construir lo que hoy conocemos como el Padrón Electoral y la generación de credenciales de elector.

“Después de 105 días llegamos a enlistar a 43 millones y medio de mexicanos, empadronados 39 millones y con su credencial y con toda la posibilidad de votar a 36 millones y medio”, expuso.

La doctora en Geografía, Celia Palacios advirtió sobre algunos pequeños detalles que deben cuidarse, como son los propios partidos, que de alguna manera pueden llevar a la desconfianza de un instrumento que es totalmente confiable.

Asimismo, observó que a pesar de lo consolidado de la base de datos, aún hay áreas de oportunidad para que el padrón pueda ser objeto de estudio de fenómenos como el desplazamiento de población por inseguridad, la migración intermunicipal e interestatal forzada, así como la migración internacional.

“Sabemos que el padrón, la Lista Nominal son unos excelentes instrumentos electorales y eso no se lo tenemos que mostrar, comprobar o convencer ni al INE, ni a los partidos, pero sí necesitamos darlo a conocer y que esto se difunda”, indicó.

Para ello, dijo son fundamentales los estudios especializados sobre la identidad, más aún cuando se ha retomado el tema de la cédula, considerando que tenemos un gran número de población no registrada ante el Registro Civil y sin credencializar.

30 años de avances en la fiscalización

Durante las últimas tres décadas se han tenido grandes avances legislativos y técnicos para fiscalizar los ingresos y gastos que garanticen un piso mínimo de competitividad durante los comicios, aseguró la Consejera Adriana Favela.

En su participación en la mesa “Fiscalización y rendición de cuentas”, organizada en el marco de la Conmemoración por el 30 aniversario del IFE-INE, reconoció que a pesar de los logros que se han alcanzado, se mantienen áreas de oportunidad para mejorar la rendición de cuentas a la que no terminan de acostumbrarse.

“El próximo año tenemos un reto monumental por todos los cargos en juego, son más de 21 mil cargos, y tenemos esta tarea de decirles que tienen que actuar dentro de la normatividad y la legalidad, aunque a veces es un poquito complicado que los partidos se metan en este carril”, manifestó.

La Consejera realizó una síntesis de la labor que lleva a cabo la autoridad electoral en la materia para garantizar un piso mínimo de competitividad entre todos los actores y verificar que los recursos a los que acceden no sean de entes prohibidos, en especial del narcotráfico o la delincuencia organizada.

En este sentido destacó la importancia de contar con el respaldo de las autoridades del Estado mexicano en su obligación de proporcionar toda la información al INE cuando se realice una investigación, ya que en muchos casos trascender el secreto bancario, fiscal y hasta ministerial representa un obstáculo para la fiscalización.

“Es muy común que las autoridades se opongan a dar la información que necesita el INE para hacer una fiscalización muchísimo más a fondo y más completa y, obviamente, también hay algo muy importante. En la vida real siempre tenemos problemas para acceder a la información”, dijo.

En este aspecto, el investigador de la División de Estudios Políticos del CIDE, Javier Aparicio, anticipó el reto que tendrá la autoridad electoral el próximo año con un número récord de presidencias municipales, así como diputaciones federales y locales que van a buscar la reelección.

“Va ser muy difícil para el INE fiscalizar los gastos de campaña de legisladores buscando la reelección sin tener que ensuciarse las manos en el sentido de que va a parecer que el INE está invadiendo el ámbito del Poder Legislativo, pero en los hechos durante 60 días serán candidatos en campaña, así que la fiscalización en un entorno de reelección será un reto adicional”, añadió.

Agregó que en México el ejercicio del gasto público no está suficientemente vigilado lo que dificulta el trabajo del INE, que ante la falta de certeza de que el erario público no se desvía a las campañas, éstas deben fiscalizarse.

Por ello, cuestionó la pertinencia de establecer topes de gastos durante las campañas, ya que si es muy bajo se beneficia al partido en el poder, mientras que si son muy altos se favorece al partido que tenga la mayor capacidad de obtener recursos.

El investigador también alertó que las sanciones no son proporcionales a las infracciones que cometen los candidatos o partidos, ya incluso la anulación de los comicios por rebase de tope de gastos de campaña ha sido desestimado por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.

En su oportunidad, la Presidenta Ejecutiva de Mexicanos Contra la Corrupción, María Amparo Casar advirtió sobre la gran complejidad que supone la ejecución de la fiscalización, en donde los actores políticos buscan ocultar lo fiscalizable y las artimañas para conseguirlo resultan infinitas.

Por ello enunció cinco de las que consideró son las principales complejidades, ya que los instrumentos de control y fiscalización con los que cuentan las autoridades suelen ser insuficientes o están llenas de lagunas o sujetas a interpretación.

Agregó que las normas que se deben hacer cumplir son demasiadas, imperfectas y hasta contradictorias, además de que el régimen de sanciones existente lleva a que valga la pena correr el riesgo de incurrir en un delito electoral.

“En las condiciones actuales lo máximo que podríamos esperar de una fiscalización por parte de la autoridad electoral es una fiscalización defectuosa y que al mismo tiempo en estos cinco puntos que menciono están los retos que enfrentan los consejeros en el tema de la fiscalización”, añadió.

No obstante reconoció los avances que se han alcanzado a lo largo de los años, aunque estimó necesario hacer política pública, que inicie por una ley de financiamiento base cero y se integre al sistema de fiscalización a otros organismos, así como prohibir el uso de efectivo en campañas y bancarizar las operaciones de los partidos.