Por: Redacción/

El coordinador del Grupo Parlamentario de Morena, Mario Delgado Carrillo, defendió la visión del Gobierno de la República de construir un Estado de Bienestar, al reconocer los derechos sociales en la Constitución y dirigir los apoyos a quienes más los necesitan.

En un comunicado, afirmó que el Estado de Bienestar que propone el presidente Andrés Manuel López Obrador se basa en el reconocimiento y acceso a los derechos sociales, y tiene mayor alcance que una renta básica universal, “pero no como un cheque para todos, sino como un derecho social, donde los grupos más vulnerables, finalmente, tendrían un apoyo a partir de su necesidad”.

El legislador participó en el encuentro virtual Diálogos de Cambio “Renta Básica en Tiempos de Pandemia”, organizado por el Grupo de Puebla, en donde también intervinieron, entre otros, la expresidenta de Brasil, Dilma Rousseff, y el expresidente de Colombia, Ernesto Samper, para intercambiar sus visualizaciones sobre la aplicación de un instrumento que permita mitigar el impacto económico en las familias, durante la emergencia sanitaria por Covid-19.

Recordó que antes de la llegada de la pandemia a México, el Congreso de la Unión realizó una reforma de gran alcance para garantizar en la Constitución Política, derechos universales como la pensión a adultos mayores, becas para los jóvenes, niños y personas con discapacidad, así como el establecimiento de un sistema de salud de calidad y con medicamentos gratuitos.

Todo esto generó que, de 32 millones de hogares en México, 18 ya reciban un programa social y ahora se incrementaron los apoyos por la pandemia para llegar a 24 millones de familias, resaltó Delgado Carrillo.

“La clave está en identificar, y aquí en México es muy confuso, en el debate político, si de renta básica estamos hablando como un plan emergente para enfrentar el Covid, o estamos ya hablando de un concepto permanente (…), aquí la pregunta es: ¿cómo seremos más eficaces para combatir la desigualdad y la pobreza?”, mencionó.

En México, advirtió, se creó una paradoja, porque quienes acusaban a Andrés Manuel López Obrador de que podría ser un presidente populista que iba a gastar de más, ahora le están pidiendo que gaste y se endeude.

“Quienes estuvieron impulsando un Estado mínimo, porque asumían que el Estado siempre era corrupto y que no generaba valor, ahora quieren que salga a rescatar a todos. Quienes votaron hace pocos meses contra los derechos sociales en la Constitución, ahora quieren el ingreso vital. Entonces estamos viviendo una especie de paradoja en México”.

El líder parlamentario comentó que hace dos años el presidente López Obrador emprendió un cambio de régimen político, pero también de modelo económico para desarticular el sistema político y el modelo económico que teníamos, cuyo eje principal era la corrupción.

“Y en dos años se tienen grandes avances hacia una auténtica democracia, un real respeto a la división de poderes, un Gobierno transparente y austero, finanzas públicas sanas sin endeudamiento ni mayores impuestos, gasto público inteligente, inversión pública para detonar el desarrollo regional, un salario mínimo fortalecido, y programas sociales convertidos en derechos constitucionales”, destacó.