• El XX Congreso de Teoría y Análisis Cinematográfico tuvo por objetivo propiciar reflexiones, conocer el estado del arte en este campo y estimular el intercambio académico entre investigadores.

Por: Redacción/

El cine, además de ser una experiencia estética, puede ser una herramienta poderosa para la transmisión de conocimientos y la ejemplificación de situaciones que atañen a diferentes disciplinas, afirmó la doctora Carina Gómez Fröde, integrante del Instituto Mexicano de Derecho Procesal, durante el XX Congreso de Teoría y Análisis Cinematográfico.

En el caso del derecho y la historia de los procesos judiciales, lo anterior se puede notar en el film de Sacco y Vanzetti (Sacco e Vanzetti), docudrama dirigido por Giuliano Montaldo, que expone el caso de dos inmigrantes italianos injustamente acusados por un supuesto robo a mano armada, quienes fueron sentenciados a la silla eléctrica en Massachusetts, Estados Unidos.

Un “ejemplo de cuando se instrumentaliza el sistema de justicia en defensa de intereses políticos y en favor de una clase conservadora, que necesitaba dar un escarmiento a los movimientos anarquistas”, apuntó Gómez Fröde en la actividad convocada por el Doctorado en Humanidades de la Unidad Xochimilco de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), la Asociación Mexicana de Teoría y Análisis Cinematográfico (SEPANCINE) y la Escuela Nacional de Artes Cinematográficas (ENAC).

A decir de la jurista, la historia permite mostrar a los estudiantes de derecho y licenciaturas afines las irregularidades cometidas en el caso: la falta de pruebas, la falsificación de testigos, el actuar de un juez bajo consigna, los acuerdos entre el juzgador y el fiscal, y una resolución injusta.

“Después de ver esas escenas les recomiendo investigar las razones por las que Sacco y Vanzetti fueron condenados, pese a que eran inocentes; además de ahondar en otros procesos famosos en los que los jueces hayan actuado con total parcialidad, inducidos por los poderes fácticos”, agregó la especialista.

El docente José María Sorando Muzás sostuvo que la integración de las matemáticas en el séptimo arte puede darse desde el título o el cartel, hasta el uso de la geometría para configurar escenarios, ambientes y planos (como el expresionismo alemán).

Además pueden usarse sus pautas a la hora de configurar los guiones, valiéndose de la simetría argumental, el paralelismo de tramas, las autorreferencias y las convergencias de historias. Estos y otros recursos pueden ser utilizados como valores expresivos en la construcción de personajes o apelando a la mirada matemática del espectador para obtener conclusiones.

Aunque para muchos estudiantes las matemáticas son un campo difícil, el experto en tecnologías de la Información aplicadas a la educación apuntó que no deben ser aburridas ni tener como única referencia los libros, pues se puede llegar a ellas desde distintos ángulos, con artículos de prensa, juegos matemáticos, fotografía matemática y cine.

“Usar el cine dentro de esta metodología es como hacer pinceladas sueltas en un cuadro impresionista, si nos acercamos a ellas parece que carecen de sentido, pero en su conjunto tienen un objetivo común: que el alumno se apropie de las matemáticas como un elemento más integrado a su mundo”.

Sorando Muzás señaló que la utilización de este recurso aporta credibilidad y muestra su uso en diferentes contextos, vinculando a las matemáticas con las emociones, la aventura, la intriga, el humor y la vida misma.

También pueden servir para motivar conceptos, resolver problemas, repasar lo que se ha aprendido en el aula, identificar errores frecuentes, suponer variantes de las condiciones en las que se ha producido cierta escena y deducir las consecuencias que de ellas se derivan con moldelos como el hipotético deductivo o la teoría de la probabilidad.

El también divulgador concluyó que como docente se debe generar interés en el alumno y demostrar que las matemáticas son aplicables en la vida y en cualquier situación fuera del ámbito escolar, generando un ambiente más relajado, sin miedo o ansiedad y estimulando la creatividad, la cual es el motor del conocimiento.

El XX Congreso de Teoría y Análisis Cinematográfico tuvo por objetivo propiciar reflexiones, conocer el estado del arte en este campo y estimular el intercambio académico entre investigadores.