Por: Redacción/

La cancelación del presupuesto que se brindaba a las Casas de Mujer Indígena o Afromexicana (CAMI) ha provocado su cierre, y deja en vulnerabilidad e incertidumbre, a miles de mexicanas que requieren apoyo en salud sexual o reproductiva o que han sido víctimas de violencia, denunció la diputada María Ester Alonzo Morales (PRI).

Por medio de un comunicado, la diputada indicó que las medidas para mitigar y atender la enfermedad Covid-19 requiere de todos los esfuerzos, pero resulta inconcebible que ante el incremento de la violencia contra las mujeres, se hayan retirado los recursos a estos importantes espacios.

Exhortó al titular del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas a que atienda y dé respuesta a las necesidades de 35 CAMI localizadas en distintos puntos del país.

“No hay que olvidar que debido al alcance y proyección que ha tenido el trabajo realizado con las mujeres indígenas y afromexicanas, las CAMI han sido reconocidas por el Comité para la Eliminación de la Discriminación Contra la Mujer, como una buena práctica para el ejercicio de los derechos humanos, individuales y colectivos de esta población”.

Destacó la buena labor, compromiso y responsabilidad social de quienes están al frente de las casas, donde han recibido apoyo miles de mujeres que se encuentran en la indefensión.

“Las CAMI están cerrando sus puertas, ya que no hay recursos para solventar las necesidades de quienes llegaron ahí con la esperanza de una vida mejor. En tiempos de Coronavirus, estas mujeres tendrán que lidiar con la pandemia por SARS-COV-2 y la violencia”, agregó.