• La diputada perredista subrayó que por mínimo que parezca el incremento al IEPS, la realidad es que el costo de frutas y verduras, medicinas, cárnicos y lácteos, entre otros están aumentando un 15 por ciento, en promedio.

Por: Redacción/

La diputada Mónica Almeida López (PRD), indicó que la actualización del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), es una forma disfrazada de aumentar los impuestos que ya está ocasionando incremento en los precios de los productos de la canasta básica.

En un comunicado, subrayó que por mínimo que parezca el incremento al IEPS, la realidad es que el costo de frutas y verduras, medicinas, cárnicos y lácteos, entre otros están aumentando un 15%, en promedio, respeto al 2019, de acuerdo con la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec).

“Recientemente compartí que los mexicanos arrancamos el año con nuevos impuestos ocasionando que los precios de los productos de la canasta básica aumenten, pero cabe hacer énfasis que esto no sólo perjudicará más los bolsillos de los más necesitados durante esta pandemia, la afectación es pareja”.

Asimismo, la integrante de la Comisión de Energía llamó al Gobierno Federal a realizar una enmienda respecto de la actualización del IEPS, y generar una reactivación económica a través de apoyos como el Ingreso Mínimo Vital y un modelo fiscal que evite la pérdida de más empleos.

“Estamos a tiempo de evitar que cientos de familias no puedan acceder a los productos básicos para alimentarse y tener una vida plena; desde la Cámara de Diputados he presentado iniciativas encaminadas a generar una reactivación económica a través de estímulos fiscales”.

Almeida López comentó que el mayor incremento lo tuvo el nopal, al pasar de 39 a 58 pesos el kilo, seguido del muslo de pollo con alza de 49 a 60 pesos el kilo, y alimentos frescos con aumentos de al menos 6 por ciento.

La diputada perredista recordó que durante el 2020 algunos productos llegaron a sextuplicar su valor, como las lentejas, el arroz y el frijol.

También expresó que el incremento del 15% al salario mínimo se vuelve una medida de bajo impacto, ya que el poder adquisitivo de los mexicanos permanecerá igual sin generar un cambio en la vida de las personas.