• Además persiste el escándalo de la deuda contratada en estos últimos años, aprobada por la Cámara local mediante decreto número 809 en el 2019.

Por: Javier Zavala/

El informe final presentado por la Auditoría Superior de la Federación del ejercicio fiscal 2020, en el análisis del gasto federalizado señala que el Estado de Oaxaca tiene un monto observado por aclarar de 4,763.2 millones de pesos, siendo el que presenta el mayor monto de todas las entidades federativas, un penoso primer lugar. Los rubros que presentan más observaciones son los del sector salud en su totalidad y el fondo de infraestructura social (FISE).

Pero además persiste el escándalo de la deuda contratada en estos últimos años, aprobada por la Cámara local mediante decreto número 809 en el 2019.

Esta deuda tiene dos componentes, una primera autorización por 3,275 millones de pesos para infraestructura productiva y una segunda aprobación por 13,151 millones de pesos para restructurar parte de la deuda pública a largo plazo del Estado.

Destaca en el decreto la aprobación para que la secretaria de finanzas pudiera ocupar el 30% del total de ambos financiamientos para contratar garantías de pago oportuno u operaciones financieras similares, es decir tendrían hasta .

Así, el gobierno del Estado de Oaxaca contrató instrumentos derivados tipo “swaps” por 12 mil 810 millones de pesos con Banco Santander a tasa sumamente elevadas que van entre un 8.82% y un 8.84%.

De acuerdo a la información pública contenida en el Registro Público de Deuda de la Secretaria de Hacienda y Crédito Público, los instrumentos derivados fueron contratados el 25 de agosto de 2020.

No resulta justificable que el Gobierno de Oaxaca haya contratado estos instrumentos a tasas tan altas cuando los Swaps a tres años, en esos momentos, cotizaban a 4.55%, de acuerdo con información de Bloomberg.

Tan solo este año, por el hecho de haber contratado estos Swaps, Oaxaca pagará, aproximadamente, 326 millones de pesos de intereses adicionales.

Esta operación llama más la atención porque en el portal de licitaciones de la Secretaria de Finanzas de Oaxaca no se encuentra publicada la licitación ni el falló de dicha contratación, a diferencia de otras licitaciones de instrumentos derivados que si se encuentran en ese sitio de internet.

Un Swap es instrumento derivado mediante el cual el acreedor intercambia una tasa variable, en este caso TIIE a 28 días, por una tasa fija, por un periodo determinado.

Si bien, estos instrumentos pueden proteger al deudor de la volatilidad de los mercados, si se utilizan indebidamente, se le puede generar una afectación económica muy significativa a un gobierno.

Lo anterior cobra mayor relevancia al saberse que quien fue el responsable de estructurar estos swaps fue Fernando Apórtela Rodríguez, ex subsecretario de Hacienda con Luis Videgaray en el sexenio de Peña Nieto, dueño de la firma Altor, quien cuenta al día de hoy es investigado por la Secretaria de Hacienda y Crédito Público.

El exsecretario de finanzas de Oaxaca, Vicente Mendoza y el secretario Jorge Hidalgo deberán aclarar este turbio asunto, sobre todo este último cuya firma fue la que autorizo estos instrumentos financieros.