Por: José Manuel Mota Fernández

La jornada 16 cerró como la más limpia en lo que va del torneo, solamente se mostraron 38 tarjetas amarillas y ningún cartón colorado, sin embargo, hubo dos sancionados, el primero fue por fingir en una jugada que benefició a su equipo, decretándose un penal y el segundo fue por acumular cinco tarjetas amarillas en un mismo torneo. Ambos jugadores cumplirán un partido de suspensión.

En el partido disputado entre América y Monterrey, el jugador número 7, Rogelio Funes Mori recibió un partido de sanción, luego de que fingió una falta dentro del área americanista. En la jugada el delantero de los Rayados ingresó al área y al sentir la presión de Pablo Aguilar, defensor de las Águilas, se dejó caer, esta situación fue juzgada por Fernándo Hernández, árbitro central del partido, como penal, convirtiéndose en la primera anotación del partido.

Funes Mori será suspendido una jugada y se desconoce si el árbitro novato recibirá algún tipo de sanción por juzgar de mala manera esta acción. Esta jugada se pude considerar como el error más grande del central en lo que va de su carrera, ya que fue su segundo juego de alto nivel, como antecedente, ningún silbante que haya juzgado solo una jugada mal en el partido, ha recibido sanción, por lo que Hernández debería seguir pitando de manera regular.

El segundo jugador suspendido pertenece al Club Querétaro y es Mario Humberto Osuna, luego de que recibió una tarjeta amarilla en el partido contra los Pumas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), este jugadora no tendrá minutos en la jornada 17 del Clausura 2016, cuando visiten a Puebla, ya que el jugador llegó a su quinta amonestación del torneo.

Pumas está a una jornada de convertirse en el equipo más limpio del torneo, ya que únicamente tiene 20 cartones preventivos.