Por: Erik Pérez

Gracias a uno de los goles más torpes en la carrera de Guillermo Ochoa el Club Deportivo Eibar venció al Granad por dos goles contra uno. El anotador del tanto fue Pedro León, quien dejo al portero mexicano en vergüenza por el tanto, además su compañero Sergi Enrich cerró la victoria en el último minuto para enmudecer al Estadio de Los Carmenes. El único tanto de Granada fue por parte de Artem Kravets, quien lo anotó ante Yoel, portero suplente que vio acción ante la expulsión del arquero Asier Riesgo al minuto 32.

El partido en el primer tiempo desmereció el nivel de su liga, ya que se mostraron con poco peligro y con jugadas que no inquietaban ninguno de los dos marcos, hasta el minuto 32 cuando el portero Asier Riego cometió una falta fuera del área cuando derribo a su rival por buscar la pelota, a lo que el árbitro del encuentro Daniel Jesús Trujillo respondió con una tarjeta roja directa, por esta razón tuvo que entrar el portero suplente Yoel, el jugador sacrificado fue Jota.

Cuando parecía que el partido sería pan comido para el Granada por jugar setenta minutos con un hombre menos, un oso del arquero mexicano Guillermo Ochoa cambió el rumbo del partido. E, intento fue de Pedro León, quien al verse entre una doble marca, frente a la portería decidió deshacerse de la pelota con un disparó potente y bien dirigido a portería, pero en el momento en que el balón llegó a la posición de ‘Paco Memo’ pegó bruscamente en el suelo y votó incluso por encima del portero quien intentó sacarla en cuclillas y con su mano izquierda, pero la fuerza del movimiento rotatorio lo venció causando el gol.

Posteriormente, Granada se encargó de atacar la meta de Yoel en reiteradas ocasiones, pero no fue hasta el minuto 76, cuando el delantero ucraniano Kravets encontró el empate. El gol llegó después de un tiro de esquina en la banda derecha, cobrado con la ventaja defensiva, pero el primero en tocar el esférico fue un jugador local quien la mando al poste, a continuación el poste redujo la velocidad y el balón quedo en la línea de meta, donde el atacante solo tuvo que empujar.

El clímax del partido llegó en el último minuto cuando ambos equipos daban el empate por bien servido, sin embargo con toques seguros Eibar llegó a la cancha contraria y dejó a Sergi Enrich solo en el área y con espacio para enfrentar a Ochoa, quien aunque salió a cubrir el disparo no pudo hacer nada ante el pase a la red que paso justo entre su pierna y el campo de juego.

Con este resultado Eibar se colocó como sexto lugar general y enfrentará a Sevilla en la jornada cuatro, mientras que Granada buscará su primer victoria en contra de Betis el próximo viernes.