Por: Iudex/

Esta jornada 13 del Clausura 2018, que solamente nos entregó la sorpresa de la victoria de los rojinegros de Atlas sobre los ex líderes de la competencia, Santos Laguna, nos dejó claro una vez más que el Video Assistant Referee o VAR, es muy necesario en el futbol mexicano, como ya lo había dicho en otras ocasiones.

Este fin de semana, se presentaron dos acciones puntuales que, combinadas con un mal trabajo de los árbitros y la falta de conocimiento de algunas reglas, se resolvieron de la peor manera posible y sí, una de ellas pudo representar algo más que un penal no marcado.

La primera de ellas se dio el domingo en el Luis ‘Pirata’ de la Fuente. Para entender el contexto de esta acción es necesario decir que los del puerto iban ganando 1-0 y en el 90+5′, con el tiempo agregado cumplido, Jorge Isaac Rojas señaló una pena máxima a favor de los Xoloitzcuintles de Tijuana.

A continuación se presenta el video de la acción, con diferentes señalizaciones que se explican debajo del mismo.

  1. Se produce el choque entre Melitón Hernández y el delantero de los Xolos.
  2. Al momento de salir, Melitón Hernández gana la posición sin cometer ninguna falta.
  3. La rodilla del portero jarocho, que fue señalada por los comentaristas de TV Azteca como la zona de contacto, no tiene nada que ver en la jugada.
  4. Al momento de caer, Melitón sujeta por el cuello a su rival y lo lleva hasta el suelo en lo que sí se puede considerar como una infracción.

Luego de una “exhaustiva” revisión entre el central y el abanderado que más cerca estaba, concluyeron que no había nada que señalar y dieron marcha atrás a la decisión de manera incorrecta. ¿Qué hubiera pasado con el VAR? todos los integrantes del cuerpo arbitral, en caso de que hubieran apreciado el último jalón, coincidirían que la pena máxima sí se tenía que marcar.

Suponiendo sin conceder que Tijuana hubiera marcado desde los 11 pasos, Veracruz tendría 1.0306 en la tabla del cociente y estaría a partidos de poder desplazar a Lobos BUAP, quienes pueden convertirse en los últimos en el descenso si pierden contra Cruz Azul y Veracruz gana o empata.

La segunda de ellas se dio el domingo en Ciudad Universitaria, cuando los universitarios iban ganando 1-0 y Luis Quintana se barrió en la línea de entrada del área grande para derribar a su rival, quien ya iba de frente a la portería en lo que se consideró como una jugada manifiesta de gol.

De nueva cuenta, el polémico y funcional VAR hubiera encajado a la perfección:

  1. Luis Quintana se barre para intentar sacarle el balón a su rival.
  2. Se produce el contacto a la altura de los muslos del defensor universitario.
  3. Minutos después, el central decide expulsar al zaguero de los Pumas.

Con la ayuda del VAR y sin necesidad de dejarle la tarea a la Comisión Disciplinaria, se hubieran percatado que el jugador de Necaxa no tenía posibilidades de llegar por el balón, que la barrida en esa zona no predispone una tarjeta y que en ningún momento se cortó una jugada manifiesta de gol.

Pero esto es algo que se ve regularmente en el futbol mexicano, pues jornada a jornada hay errores que se pueden corregir con el VAR, ese que dicen que le va a quitar la esencia al deporte, que no es una buena idea y que, básicamente, no va a servir para mucho en la Liga MX.

Ya para terminar queda remarcar que este mecanismo va a llegar a la Liga MX en los cuartos de final del presente torneo.