Por: José Manuel Mota Fernández

Ángel María Villar, presidente de la Real Federación Española de Futbol, fue detenido este martes por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guarda Civil de Madrid, luego de ser acusado de corrupción, al igual que a su hijo Gorka, en el operativo anticorrupción ordenado por la Audiencia Nacional.

Los cargos por los cuales fueron detenidos ambos son: administración desleal, apropiación indebida, corrupción entre particulares, falsedad documental y posible alzamiento de bienes, que se habrían dado en la organización de partidos amistosos, entre ellos el que sostuvieron contra México después de Sudáfrica 2010.

Además se revisarán las casas y departamentos de los detenidos, así como las oficinas de la RFEF con el fin de encontrar evidencias que sustenten las acusaciones en contra del mandatario de la máxima organización del futbol español.

El caso de Villar y su hijo no será el único pues se tienen previstas 10 detenciones donde figuran personas como la del vicepresidente de la Federación y presidente de la Federación tinerfeña, Juan Padrón, así como la del secretario de la federación regional, Ramón Hernández Baussou.

Fue el año pasado cuando el Consejo Superior de Deportes comenzó con las investigaciones acerca de este tema que el día de hoy dio frutos al detener a dos personas involucradas.