Por: Redacción/

Frente al obelisco en honor a la tropa mexicana que resistió el ataque del ejército estadounidense durante la intervención, ubicado en el ala noroeste al interior del Complejo Cultural Los Pinos, el domingo 8 de septiembre el Gobierno de la Ciudad de México, a través de la Secretaría de Cultura capitalina, y la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) realizaron una ceremonia cívica para recordar la Batalla del Molino del Rey (8 de septiembre de 1847).

En el acto que conmemoró el 172 aniversario de la Batalla del Molino del Rey, estuvo presente el Subsecretario de la Defensa Nacional, Dagoberto Espinosa Rodríguez; el Coordinador de Memoria Histórica y Cultural de México, Eduardo Villegas Megías, y el secretario de Cultura capitalino, José Alfonso Suárez del Real y Aguilera, quien expresó su orgullo al evocar uno de los episodios que marcaron la historia del país.

“Es para nosotros motivo de satisfacción rescatar y recuperar uno de los momentos históricos más relevantes de una gesta que a lo largo de nuestra vida como nación independiente ha sido muestra de la entrega y del valor de hombres que creyeron en la patria, que apostaron por una nación y que dieron todo por y para ella”, compartió Suárez del Real y Aguilera.

Después de rendir honores a la Bandera, se entonó el Himno Nacional y la Banda de Música de la Sedena interpretó la marcha “Oaxaca hacia la victoria”, del compositor oaxaqueño Cipriano Pérez Serna. Posteriormente, integrantes del presídium reconocieron la hazaña con una guardia de honor y depósito de una ofrenda floral.

Al subir al pódium, Dagoberto Espinosa Rodríguez dijo que recordar este acontecimiento fortalece nuestro sentido de pertenencia y nos identifica con el pasado del país, cuya herencia trasciende a las nuevas generaciones.

“Hoy nos reunimos para rendirle homenaje a los soldados que pelearon por preservar su génesis y el arraigo a su tierra, tradición que fortalece nuestra construcción de identidad nacional. El significado de este acontecimiento cultiva el espíritu de servicio del personal militar que forma parte del Ejército y Fuerza Aérea Mexicana”, resaltó Espinosa Rodríguez.

Registrada como una de las batallas más sangrientas en la historia de México, que dio a la nación muestra del heroísmo de los mexicanos, la Batalla del Molino del Rey, ocurrida en el poniente del Valle de México el 8 de septiembre de 1847, fue la penúltima confrontación antes de la caída de la capital ante el ejército invasor.