Por. Redacción

Con estas palabras Lydia Cacho define el punto de partida de este libro imprescindible. #EllosHablan son testimonios de diversos hombres que hablan de su infancia y ponen en evidencia la violencia que vivieron en su entorno. Ellos nos dejan ver cómo en el ambiente hogareño y hostil, los niños normalizan aquello que más tarde detonará en relaciones verticales, violentas y discriminatorias que avalan un sistema de impunidad y paternalismo salvaje.

La autora nos invita a pensar desde otro lugar para desmenuzar esto que llamamos “el hombre normal”. Una investigación que busca replantear el liderazgo masculino; cuestionar la sumisión ante la violencia a fin de que niños y jóvenes tengan nuevos asideros para construir su identidad sin atavismos.  Por medio de testimonios y de un análisis del patriarcado a través de sus voces, ella trata de señalar ese “dar por hecho” masculino que sigue siendo tan inconsciente y que permea capas de la personalidad y hasta generaciones. Todo ello con la esperanza de inspirar a la juventud al cambio.

El machismo no es una cosa, no es un concepto aislado, es la idea del masculino universal del poder humano. El machismo es la idealización de la violencia como medio, como fin, como instrumento educativo coercitivo; es una trampa que normaliza lo inaceptable: la guerra, la muerte, la tortura, la violación, la impunidad, el bullying machista, el acoso y hostigamiento, la esclavitud, el terrorismo y la delincuencia organizada.

Este libro, por tanto, es un acto de esperanza para que en el futuro millones de hombres jóvenes se sumen a la causa civilizatoria más apremiante de los próximos siglos: la deconstrucción de la cultura patriarcal que incorpora la violencia como forma de convivencia, que fomenta liderazgos verticales cuya supervivencia dependen de la opresión; esos liderazgos que tantas chicas jóvenes están imitando al creer que reproducir el modelo machista significa ser feminista, cuando lo que hacen es fortalecer el modelo hembrista, ese que resulta complemento perfecto del machista: violencias integradoras, la sutil y la concreta que van demoliendo nuestra capacidad de relacionarnos, de amar y desear sin miedo al otro, a la otra.