Por: Paola Ramos Moreno

Integrantes de comunidades indígenas de Nayarit realizaron un llamado al Papa Francisco para que  interceda ante el Gobierno Federal y se detenga la construcción de la hidroeléctica Las Cruces.

A través de una carta entregada a la Nunciatura Apostólica, aseguran que dicho proyecto “afectaría irreversiblemente el patrimonio cultural, ambiental y económico de los nayaritas”.

En el texto, los integrantes de los pueblos Náeri, Wixárica, Tepehuano y Mexicanero, denuncian que el gobierno mexicano otorgó permisos para la operación y construcción de la hidroeléctrica, que se construirá sobre el río San Pedro Mezquital, “sin haber garantizado los derechos a la consulta previa, modos de vida, religión y tradiciones de nuestros pueblos”.

De este modo, acusan, su construcción implicará la destrucción de estructuras sociales de las comunidades ancestrales y ribereñas así como de sus sitios sagrados. Además, advierten, se invadirá su territorio y existirá desplazamiento forzado de sus hogares.

Las comunidades también denunciaron que el proyecto afectará al humedal Marismas Nacionales, uno de los sistemas lacustres más importantes para la biodiversidad en la región y que, por su relevancia internacional, ha sido declarado Reserva de la Biósfera, Sitio RAMSAR y Sitio AICA.

“Hermano Francisco, la presión sobre las comunidades indígenas para imponer el proyecto Las Cruces va en aumento. Así lo demuestran las detenciones ilegales, las acciones de hostigamiento por parte del gobierno y los actos que simulan una consulta previa, misma que no puede ser tal si el proyecto ya fue autorizado”, señalan en la misiva.

Sobre la autorización del proyecto, Sandra Moguel, abogada de la Asociación Interamericana para la Defensa del Ambiente (AIDA) dijo que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) otorgó los permisos ambiental y de uso de agua para la operación y construcción de la hidroeléctrica “sin haber garantizado el derecho a la consulta previa de los pueblos indígenas afectados”, y que además “condicionó la autorización a que la Secretaría de Energía compruebe la realización de una consulta a los pueblos indígenas, lo cual debería haber ocurrido antes de emitir las autorizaciones”.

“Es por todo esto , Hermano Francisco, que solicitamos respetuosamente a Vuestra Santidad que durante su visita al país interceda por nosotros ante el Presidente Enrique Peña Nieto”, puede leerse en la carta, mediante la que llaman al jerarca católico a impedir violaciones de los derechos de las comunidades indígenas “en nombre del desarrollo” y para que se desista de llevar adelante dicho proyecto.

“Esperanzados en el poder de su intercesión, nos despedimos con el deseo ferviente de que su Carta Encíclica Laudato si’ inspire e impulse cambios profundos en las políticas, prácticas y creencias de gobiernos, empresas, sociedad civil y en la mentalidad de cada prójimo, con miras a construir un mundo más justo, más humano y realmente sostenible”.