Por: Redacción /

Los simbolismos en torno al cuerpo, la naturaleza, los ciclos de la tierra y las deidades que gobiernan los diversos niveles del cosmos, son presentados, a través de 333 piezas que conforman la magna exposición Mayas, el lenguaje de la belleza, inaugurada la noche del jueves 3 de agosto en el Museo Nacional de Antropología.

La secretaria de Cultura, María Cristina García Cepeda encabezó la apertura de esta muestra, acompañada por Alejandro Moreno Cárdenas, gobernador constitucional de Campeche;  Diego Prieto, director del INAH; José Enrique Ortiz Lanz, coordinador de Museos y Exposiciones del INAH y Antonio Saborit, director del Museo Nacional de Antropología.

María Cristina García Cepeda celebró que esta muestra, que ha itinerado por China, Alemania e Italia, sea ejemplo del portento civilizatorio de una cultura rica, misteriosa y avanzada, cuyo legado podrá ser apreciado por los visitantes.

Recordó a Miguel León Portilla quien dijo que en nuestras culturas originarias están los diversos rostros del tiempo, por ello reconoció que  en esta exposición se presenten piezas nunca antes exhibidas de nuestro patrimonio a través del Programa de Exposiciones Artísticas y Arqueológicas, iniciativa que refrenda el compromiso del Gobierno de la República, encabezado por el Presidente Enrique Peña Nieto, de mostrar la riqueza cultural de México en el mundo y acercar al público de nuestro país con el legado de las civilizaciones que la integran.

Agregó que esta muestra realizada por los antropólogos, historiadores y arqueólogos del INAH, nos invita a entrar a esta enigmática visión del mundo maya, a la riqueza de una cultura originaria que está en el corazón de nuestra identidad, permanece viva y en constante creación.

“Son acervos de los cinco estados que han tenido presencia de la cultura maya y que a través de piezas fascinantes nos permitirá transportarnos a un tiempo milenario y colocar a nuestra cultura en el centro de la relación de México con el mundo”.

Alejandro Moreno Cárdenas dijo que estos 500 años del encuentro de dos mundos es una oportunidad para conocer más sobre nuestras raíces y orígenes que han labrado a través de los siglos nuestra identidad.

Diego Prieto afirmó que esta exposición regresa a México con una propuesta enriquecida con piezas que no se han presentado y nuevas miradas sobre lo que significa la belleza y su influencia en torno al desarrollo de la Antropología

Expresó que la sexualidad, el bien estético y la reflexión y construcción de estos elementos en los pueblos antiguos es uno de los principales ejes de esta muestra, misma que se ocupa de la corporeidad de las deidades y los significados de ese mismo elemento: el cuerpo.

“Los cuerpos nos asemejan y nos distinguen, por eso el universo de los mayas es complejo porque abajo muestra el inframundo y al mismo tiempo nos dice que es el lugar donde nacen las semillas. Sus divinidades duales nos muestran lados contrastantes. Esta exposición es sin duda una de las más originales que se hayan organizado en torno al México antiguo”, agregó Diego Prieto

Durante el recorrido inaugural el público pudo conocer piezas como la escultura del Señor de Kabah, del clásico tardío (600-900 d.C) que decoraba la fachada oriente del edificio Codz Pop de Kabah mostrando un mascarón de la deidad Chaahk.

También se podrá conocer el monumento denominado Derrota perpetuada, que retrata un pasaje de Toniná, Chiapas, en el que se toma por prisionero a un Aj Kúhu´n o alto dignatario después de una batalla.

Otra pieza singular es la personificación de Quetzalcóatl en el mundo maya, llamado Kukulcán, mismo que se plasma en una pieza encontrada en Mayapán, Yucatán perteneciente al Postclásico tardío (1250-1527 d.C). Además destaca la escultura El escribano de los dioses, encontrada también en esa región y que muestra a un hombre-mono aullador que sostiene un pincel en el brazo derecho, adornado con una serpiente y en la otra un tintero con forma de caracol.

El público también podrá encontrarse con la pieza La señora Ix Baah Pak´, de Edzná, Campeche, ciudad que entre los años 649 y 672 después de Cristo, fue gobernada por una mujer a la que se representa ricamente ataviada y con una flor de la que liba un colibrí.

Asimismo la muestra incluye un registro lunar en piedra utilizado para el Juego de Pelota y hallado en Tenam Rosario, Chiapas, donde aparece la diosa Ixchel abrazando a un conejo, animal que para los mayas representaba a la luna. La inscripción en la piedra registra con exactitud el día 5 etz´nab en el penúltimo día de la luna.

La exposición Mayas, el lenguaje de la belleza, se presenta hasta el mes de noviembre en el Museo Nacional de Antropología.