Por: Redacción

Inspirado, entre otras cosas, en el cuento El Cohete de Ray Bradbury la Troupe Rojo Nariz presenta su segundo montaje Fugaz espectáculo cósmico-clown, lugar donde las estrellas son la metáfora para hablar de la libertad, de lo efímero e instantáneo de los recuerdos, de un gran viaje en una nave soñada, a través de recursos multimedia, iluminación en bóvedas del ceramista Adán Paredes y el lenguaje clown irradian una constelación silenciosa.

El proceso desarrollado por la Troupe Rojo Nariz es un llamado a imaginar un nuevo cielo cuyo leimotiv son las estrellas como metáfora de la búsqueda de sus personajes, Bo y Rayas, de sus sueños y añoranzas, en contraste a la alegoría de una dictadura militar que los persigue por mirar el firmamento e imaginar mundos mejores.

El nombre de la puesta en escena Fugaz permite distintos juegos y significados, desde las asociaciones con las estrellas fugaces o una fuga que en términos musicales se refiere a una pieza que parece una persecución de notas, y finalmente la gran fuga final de los personajes.

El lenguaje de creación de la Troupe Rojo Nariz propone dialogar con distintas técnicas y corrientes del teatro, como la corriente clásica, la escuela transgresora del teatro rudo así como el teatro de la caricia propuesto por Daniele Finzi Pasca, a través del ensamblaje de rutinas que interconectadas construyen una historia y proponen una poética propia a través del lenguaje del mimo, el clown y la pantomima, que mediante todos sus recursos escénicos, así como su ser generoso y transparente atraviesa la cuarta pared, la barrera del idioma, edad y nacionalidad. Aquí, los niños se convierten en sabios y los adultos se convierten en niños de nuevo, para permitir que revivir la esperanza se convierta en acción y movimiento que nos despierte el alma y la conciencia.

Como parte de la propuesta se proyectan constelaciones que surgen de las bóvedas de cerámica, además de recursos multimedia, que, acompañadas por la música original de la Troupe, inspirada en Jean Tirsen, Nino Rota y la música cósmica creada por Vangelis para la serie Cosmos (narrada por Carl Sagan), hacen vibrar con un acordeón, batería, guitarra y efectos de theremin este gran viaje cósmico-clown cuya producción ejecutiva y difusión la realiza la empresa cultural Proyecto Beruf. Escena Contemporánea a cargo de Valeria López.