Por: Redacción/

En el antepenúltimo día de la Sexta Fiesta de las Culturas Indígenas, Pueblos y Barrios Originarios de la Ciudad de México (FCIPBO), este viernes 30 de agosto, la plancha del Zócalo de la Ciudad de México recibió una pequeña demostración de lo que se vive en la Guelaguetza, en Oaxaca, con la presentación dancística de la agrupación La Compañera del Chinanteco.

Provenientes de la comunidad de Santiago Jocotepec, los bailarines realizaron distintas danzas como “El mezcalito”, “El palomo” y “Chinas oaxaqueñas”, que son tradicionales de la Cuenca del Papaloapan, en aquel estado del sur de México.

“Venimos representando nuestras costumbres, compartimos nuestro baile típico de nuestro municipio, que es La compañera del Chinanteco, mismo que da nombre a nuestra agrupación y en la que han participado mis bisabuelos, abuelos, tíos y hermanos”, compartió en entrevista Luciel Mendoza Mora, uno de los integrantes.

El joven detalló que a través de sus movimientos corporales las personas comprenden el lavado del nixtamal “como se hacía antes, con los pies”, y la elaboración de los “raspados”, tortillas de gran tamaño que se regalaron entre los asistentes y cuya presentación, resaltó, forma parte de los bailes tradicionales que conforman la Guelaguetza.

Charlas y talleres para valorar artesanías mexicanas

Parte de la finalidad programática de la Sexta Fiesta de las Culturas Indígenas es acercar a habitantes y visitantes de la capital a la riqueza artesanal que habita en diversas regiones del país, a través de artesanos que comparten sus tradiciones y conocimientos en la Plaza de la Constitución, para propiciar la valoración de su trabajo.

Ejemplo de ello pudo observarse durante la jornada del viernes con la presentación de Antonio Mendoza García, quien desde hace más de 40 años realiza el tapiz zapoteco. El artesano compartió su experiencia en el Círculo de Saberes ante un público de diversas edades, que escuchó con atención la explicación del arte del tejido, desde su pigmentación vegetal hasta sus técnicas de hilado.

“Me siento muy contento de estar en el Zócalo compartiendo todo el arte milenario heredado de nuestros antepasados, hay mucha gente que le gusta este trabajo y que no saben realmente de qué se trata, pero cuando se los explicas quedan sorprendidos sobre lo que hay detrás de cada pieza”, expresó el tejedor en entrevista.

El también expositor de la FCIPBO, originario de Teotitlán del Valle, Oaxaca, indicó a los asistentes que hay colores que pueden tomar hasta dos años generarlos, aumentando su costo de venta e influyendo en las peculiaridades de cada pieza, la cuales son en su mayoría desconocidas por el público y, por ende, no se pueden valorar.

“Cuando estoy tejiendo es un pedazo de mi corazón que voy hilvanando en la pieza y alguien se la lleva; se crea un lazo con cada persona que me compra y debe presumirlo porque es algo que está hecho a mano”, agregó el artista, quien participa por primera vez en la fiesta indígena, ofreciendo tapices, cojines, bolsas y monederos de hilo de lana con pigmentación vegetal.

En el Círculo de Saberes también se ofreció el “Taller de silbato de viento”, a cargo de Rubén Acebedo, integrante del Grupo Yodoquinsi, quien asesoró a los participantes en la elaboración del artefacto aerófono de barro, para introducirlos a los instrumentos de origen prehispánico.

“Vemos los juguetes que tienen los niños y todos están elaborados de plástico. Lo importante es voltear la mirada, sensibilizar al público sobre los procesos artesanales para que, cuando vea el producto en un punto de venta, lo valore y respete el costo monetario que cada artesano puso a su trabajo”, agregó Acebedo previo a su presentación con el Grupo Yodoquinsi que se realizará este domingo 1 de septiembre en el Kiosco del Zócalo, a las 16:00 horas.

La Sexta Fiesta de las Culturas Indígenas, Pueblos y Barrios Originarios de la Ciudad de México es organizada por el área de Grandes Festivales Comunitarios de la Secretaría de Cultura local para convertir a la Ciudad de México en Capital Cultural de América.

El encuentro pluricultural se realiza en el marco de 2019, Año Internacional de las Lenguas Indígenas, y tiene como invitados al estado de Veracruz, representado por las comunidades otomí, totonaca y náhuatl, y la alcaldía Xochimilco a través de sus pueblos.