• La Secretaria de Cultura del Gobierno de México destacó la importancia de los trabajos realizados, a fin de preservar este monumento histórico. “Se ha hecho un trabajo excepcional, el cual permite asegurar el futuro de nuestro patrimonio”.

Por: Redacción/

La Secretaría de Cultura del Gobierno de México, a través de la Dirección General de Sitios y Monumentos del Patrimonio Cultural (DGSMPC), avanza en las acciones de conservación y protección del conjunto monumental de la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México, las cuales se realizan en colaboración con las autoridades de la Iglesia Católica, resguardantes del insigne monumento.

La Catedral, que requiere de constantes labores de conservación y que además sufrió daños moderados en el sismo de 2017, en una primera etapa de atención, a cargo de la DGSMPC, con el acompañamiento del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), y del Instituto de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México, se realizaron trabajos de mantenimiento al sistema de pilotes de control, erradicación de flora parásita y calafateo de grietas, y rehabilitación de instalación eléctrica y sistema pararrayos, con una inversión de cerca de 20 millones de pesos. Estos trabajos, considerados urgentes a efecto de atender diversos problemas de conservación que han surgido por el deterioro del monumento.

Este domingo, 15 de agosto, en el marco de la Fiesta Patronal de la Catedral, dedicada a Santa María de la Asunción, y de la conclusión de la primera etapa de restauración, se llevó a cabo la inauguración de la “Exposición de los trabajos de restauración en el Conjunto Catedralicio”- abierta al público y organizada por el Cabildo de la Catedral Metropolitana-, a la cual acudieron la secretaria de Cultura del Gobierno de México, Alejandra Frausto Guerrero; la subsecretaria de Desarrollo Cultural, Marina Núñez Bespalova; el director general de Sitios y Monumentos del Patrimonio Cultural, Arturo Balandrano Campos; así como el dean de la Catedral Metropolitana, Ricardo Valenzuela; la presidenta del Consejo Asesor Honorario de la Coordinación de Memoria Histórica y Cultural de México, Beatriz Gutiérrez Müller; autoridades del Gobierno de la Ciudad de México, entre otros invitados.

Al hacer uso de la voz, la Secretaria de Cultura del Gobierno de México destacó la importancia de los trabajos realizados, a fin de preservar este monumento histórico. “Se ha hecho un trabajo excepcional, el cual permite asegurar el futuro de nuestro patrimonio”.

Recordó que las labores forman parte del Programa Nacional de Reconstrucción, el cual puso en marcha esta administración: “Cumpliendo la indicación del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, hoy entregamos la primera etapa de las obras de reconstrucción, restauración y mantenimiento de la Catedral Metropolitana, patrimonio cultural de este país, que se ubica sobre nuestras propias raíces”. Agradeció el trabajo de las y los especialistas que durante estos meses han participado en las labores, “son las manos de esta comunidad, que la edificaron años atrás, las que hoy la restauran”.

Previo al corte de listón de la exposición, el arzobispo Primado de México, Carlos Aguiar Retes, llevó a cabo la Misa Solemne por la festividad religiosa, y en la cual, agradeció los esfuerzos institucionales que se han llevado a cabo para “restaurar y mantener, como es debido, esta Catedral Metropolitana. Muchos de ustedes aquí presentes que están al frente de estas instituciones, les agradecemos de corazón la sinergia en bien de la Catedral”.

El dean de la Catedral, Ricardo Valenzuela, al término de la misa, agradeció a las instituciones de Gobierno federal y de la Ciudad de México, y empresas privadas que han participado en el proceso. De igual forma, resaltó las gestiones de la Secretaría de Cultura para hacer efectivo el uso de los recursos para la restauración de la Catedral, mismos que se han ejercido a través de la asociación civil denominada Catedral Metropolitana Caridad, Educación y Cultura. “Podemos decir con mucha alegría que el recurso se ha ejecutado de manera puntual, transparente… Ha sido un ejemplo esta restauración en el manejo de recursos”.

En estos trabajos, la DGSMPC cuenta con el acompañamiento del Instituto Nacional de Antropología e Historia, del Instituto de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México y del Gobierno de la Ciudad de México.

Las acciones se agrupan en tres grandes proyectos:

1. Mantenimiento al sistema de pilotes de control del conjunto catedralicio, por un monto superior a los 4 millones de pesos. Para mantener la estabilidad estructural ante los efectos de hundimientos diferenciales; son acciones que no se habían realizado en varios años. La información y los estudios generados en estos trabajos proceso permitirán analizar y determinar las acciones de mantenimiento mayor o correctivo y a las afectaciones en la estructura ocasionados por el subsuelo.

2. Erradicación de flora parásita y calafateo de grietas, con una inversión de más de 9 millones de pesos. Estas labores tienen el objetivo de retirar los arbustos que han crecido en las fisuras y juntas de la mampostería del edificio y vulneran la capacidad estructural de sus fábricas, y para evitar temporalmente la entrada de agua de lluvia y humedades a través de fisuras y grietas en cubiertas y muros que pueden dañar los bienes muebles que se resguardan en el interior.

Al efectuar los trabajos, se detectaron daños más severos a los previstos en la linternilla de la cúpula de la Catedral ocasionados por la flora parásita y que representaban un riesgo para la estabilidad estructural. Por tal motivo, el Instituto de Ingeniería de la UNAM emitió la recomendación de retirar los elementos pétreos de la linternilla en carácter de urgente a fin de controlar el riesgo de colapso parcial. Ante esta situación y derivado de diversas reuniones entre la Coordinación Nacional de Monumentos Históricos del INAH, la DGSMPC y el Instituto de Ingeniería, en lugar de retirar algunos elementos de la linternilla, se tomó la determinación de efectuar la consolidación estructural y la restauración integral de la linternilla; lo cual se efectuó de manera exitosa y con esta intervención se aseguró la permanencia de este elemento arquitectónico diseñado por el alarife Manuel Tolsá en los albores del siglo XIX. Estas acciones concluyeron de forma satisfactoria hace unos días.

3. Rehabilitación de instalación eléctrica y sistema pararrayos, con más de 6.5 millones de pesos. Tiene el objetivo de prevenir y minimizar el riesgo de conflagración en el interior de la Catedral y para la reposición del sistema de pararrayos para la protección de pináculos, torres y cúpulas ante descargas en tormentas eléctricas. Se contó con el apoyo técnico de la Comisión Federal de Electricidad que, a través de su personal especializado, dirige y supervisa los trabajos que se realizan, acción que permite cumplir con los más altos estándares de seguridad. Adicionalmente, su actuación permitió obtener ahorros importantes en el desarrollo del proyecto, el costo de materiales y en los procedimientos de ejecución.

El conjunto de acciones tiene por objeto minimizar los posibles riesgos y vulnerabilidades por la falta de mantenimiento; en una segunda etapa, se llevarán a cabo acciones de restauración por los daños registrados en la Catedral Metropolitana durante los sismos de 2017, las cuales tendrán continuidad a través del INAH, para ello se destinarán recursos equivalentes a 57 millones de pesos, disponibles a través del Fondo de Desastres Naturales (FONDEN).

La Catedral Metropolitana de la Ciudad de México es el monumento histórico de carácter religioso más importante del país, donde confluyen momentos trascendentes de la historia y del arte, desde la época prehispánica hasta nuestros días; tiene 67 metros de alto hasta la cruz de las torres, lo que la convierte en el edificio virreinal más alto del Centro Histórico de la capital mexicana. Se compone de cinco naves con 51 bóvedas, 74 arcos y 40 columnas, un gran coro, sacristía y la Capilla Real, donde se ubica el Altar de los Reyes.

Al haber sido erigida a lo largo de 240 años, su construcción presenta diferentes estilos arquitectónicos: gótico, plateresco, barroco y neoclásico.