Por: Redacción

María Cristina García Bravo, diputada del GPPRD, presentó ante la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, un punto de acuerdo para exhortar a Raúl Cervantes Andrade, titular de la Procuraduría General de la República (PGR), a resolver las carpetas de investigación correspondientes que se derivan de las múltiples denuncias por el robo de combustible de los ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex).

 En la propuesta, la legisladora hizo un llamado para que la procuraduría proceda a solicitar al juez de control de manera inmediata, las medidas cautelares de extinción de dominio de los bienes muebles e inmuebles que adquirieron los integrantes de la delincuencia organizada y los servidores públicos que han participado en los robos, así como a la inmovilización provisional e inmediata de recursos que tienen ilícitamente en el sistema bancario con motivo de la extracción ilegal de combustible.

 En otro punto de acuerdo, la diputada perredista solicitó que la Comisión Permanente exhorte al titular de Pemex a hacer público el número de tomas ilícitas y el monto perdido por el robo de diversos combustibles, con el objetivo de conocer con certeza el tamaño de los actos cometidos por las bandas del crimen organizado dedicadas a la “ordeña” de los ductos.

 Además, impulsa un exhorto para que el Congreso exhorte a Miguel Ángel Osorio Chong, secretario de Gobernación (Segob), a reforzar las medidas que conduzcan a evitar la “ordeña” de ductos de los diferentes combustibles y a la PGR para que detenga y procese -ante los jueces penales de juicio oral- a todos aquéllos operadores de la “ordeña”.

 García Bravo argumentó que el robo de combustible en México, es cada vez mayor y las pérdidas para Pemex ascienden a más de mil millones de dólares al año.

 Recordó que en 2010, Pemex reportó pérdidas por mil 692 millones de litros de combustible por fuga y ordeña de sus ductos. El año pasado esa cifra ascendió a 2 mil 282 millones de litros; es decir, 35% más, en comparación con seis años atrás. En pérdidas económicas, el daño a las finanzas públicas de 2009 a 2016 por fugas y robo de combustible es de 159 mil 957 millones de pesos.

 En volumen, lo perdido asciende a 14 mil 652 millones de litros, que implica hasta 250 pipas de combustible diarias. Además, dichas pérdidas son una constante, pues en ningún año Pemex ha podido frenar el robo de combustible y las fugas en sus ductos. Incluso, 2016 fue un año récord en el que se perdió 24% más combustible que en 2015.

 La legisladora perredista detalló que en el primer trimestre de 2016, el número de tomas clandestinas en la red de ductos de la petrolera aumentó 12.3% respecto al mismo periodo de 2015, al pasar de  mil 211 a mil 360. Los robos se dan principalmente en zonas cercanas a refinerías, donde el ducto es perforado sin precaución alguna y luego es conectado a un camión cisterna. Las localidades donde el año pasado se encontró el mayor número de tomas se localizan en Tabasco, Veracruz, Estado de México, Guanajuato, Puebla y Jalisco.

 Puebla, es el estado que ocupa el primer lugar a nivel nacional en este delito por concentrar el mayor número de tomas clandestinas y por el cual Pemex pierde alrededor de 7.4 millones de pesos al día. Entre 2005 y 2016, en dicha entidad se han encontrado 3 mil 161 tomas clandestinas.

 La también secretaria de la Comisión de Seguridad Pública explicó que en lo que va de la actual administración federal, se han iniciado -en promedio- 2 mil 800 carpetas de investigación al año por el delito de robo de combustible; sin embargo, no se han aplicado de manera inmediata las medidas cautelares de extinción de dominio de los bienes muebles e inmuebles que adquirieron ilícitamente la delincuencia organizada y los servidores públicos que participan en el robo de combustible.

 Pese a ello, todos los días son robados más de 5.5 millones de litros de combustible de todo el sistema, desde las refinerías hasta las gasolineras, de acuerdo a informes de dependencias federales.

 García Bravo detalló que durante los primeros cuatro años del actual gobierno, Pemex ha perdido 97 mil millones de pesos por fugas y robo de combustible, una cifra 55% superior a las pérdidas registradas en los últimos cuatro años del sexenio anterior.

 Más en un acumulado desde 2009 al 2016, el Estado mexicano ha tenido un daño acumulado en sus finanzas públicas por 159 mil 957 millones de pesos por robo de combustibles; sin embargo, advirtió que no se sabe con certeza si los datos son fieles o se quedan cortos.