Por: Redacción/

La rehabilitación y reconstrucción de las zonas afectadas, tras los sismos del 7 y 19 de septiembre, representan un desafío para los Sistemas Nacionales de Transparencia y de Anticorrupción, sostuvo el comisionado del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), Joel Salas Suárez.

“A diferencia del 85, hoy ya tenemos, no sólo la Ley sino los institutos que nos deberían garantizar el derecho de acceso a la información para monitorear cómo se está llevando a cabo el proceso de reconstrucción, que los proyectos de reconstrucción de las viviendas no se hagan como se hicieron en otra ocasión y que la reconstrucción nos permita, en términos generales, una reconstrucción entre población y autoridades”, manifestó.

Al participar en el Congreso Internacional de Comunicación IBEROCOM 2017, convocado por la Universidad Iberoamericana Puebla, Salas Suárez fue enfático que eso sólo podrá pasar si la población se involucra y sale del circulo vicioso del “si yo no creo para qué me involucro”.

“Cuestionemos y hagamos que justifiquemos cada quien nuestro rol como individuos, pero también como instituciones. No se vale que, por tener la mejor Ley a nivel internacional, que todo mundo nos quedemos sentados, cuando tenemos serios y graves problemas”, les dijo a los jóvenes estudiantes que seguían la mesa de debate “40 años de acceso a la información”.

El coordinador de la Comisión de Gobierno Abierto y Transparencia del INAI indicó que el derecho de acceso a la información ha servido para poner en evidencia la corrupción. “Que la corrupción era inherente al sistema político mexicano, era estructural al sistema político mexicano, por lo que fue necesario construir los Sistemas Anticorrupción, nacional y locales.

Lo importante es que hoy se pueda aminorar este sentimiento generalizado de impunidad”, remarcó. Joel Salas señaló que la información, sin que tenga que ser solicitada, si se pone en manos de quienes más la necesitan, podrían hacer exigibles otros derechos, toda vez que el reto del derecho de acceso a la información es consolidarlo “como un derecho llave que haga efectivos derechos sociales, económicos y culturales”.

“Es ahí en donde ambos sistemas, el de transparencia y Anticorrupción, nuestros grandes retos. Cómo hacemos para darles a ustedes este sentimiento de credibilidad, hoy nadie cree, pese a que hay un nuevo diseño institucional, pero es obligación de la población que no exija que estemos a la altura de las expectativas”, puntualizó.

Salas Suárez reconoció que, desde el 2002 a la fecha, prevalece aún la brecha entre las personas que ejercen el derecho de acceso a la información y de cómo se apropian de éste, para controlar el ejercicio del poder.

“Hay lugares en donde la información no sirve ni para que los diputados ejerzan el poder que deberían ejercer sobre el Ejecutivo, en donde el Poder Judicial no resuelve como, en principio, todo mundo esperaríamos que resolviese sobre algún caso”, apuntó.

En la mesa de debate participaron también, Ana Cristina Ruelas, directora general de “Artículo 19 México”; Josefina Buxadé, titular de la Coordinación Estatal de Transparencia y Gobierno Abierto en Puebla, y Carlos Brito, director de “Incidencia R3D”.