Por: Redacción/

El Jefe de Gobierno, José Ramón Amieva Gálvez, recibió los resultados del acuerdo de subvención entre la Ciudad de México y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) para el fortalecimiento del sistema local anticorrupción.

“Cuando hablamos de renovar un Sistema Anticorrupción, estamos hablando de sembrar la principal institución de una ciudad, de un territorio, y hablamos de atender el principal problema que es precisamente la corrupción”, enfatizó.

Abundó que lo se va a generar sobre este documento de gobernanza pública y participación efectiva de las instituciones y de la población para evitar la corrupción, es precisamente dejar un gobierno completamente entregable, manejable; que la nueva administración pueda continuar con esa relación que se tiene con la OCDE; su aplicación y retroalimentación sobre este documento, y poder ser referente para otras entidades del país.

En el Antiguo Palacio del Ayuntamiento el mandatario capitalino agradeció la confianza de la OCDE quien depositó la filosofía de su trabajo, así como sus principios de actuación, en la capital del país, acción que ya muestra resultados importantes.

El contralor General de la CDMX, Eduardo Rovelo Pico, expresó que esta fue una buena vinculación que se tuvo alrededor de un año y medio en trabajo conjunto con la OCDE, respecto a una problemática mundial que incide en todos los ámbitos de gobernanza del mundo.

Resaltó que la urbe es de las primeras entidades del país en reconocer esta necesidad de poder transitar al reconocimiento de factores que inciden en el fenómeno de la corrupción para su combate. Destacó la importancia de las medidas preventivas, mejores prácticas de carácter internacional, que también han permitido al gobierno local tener este resultado.

Jacobo Pastor García Villareal, representante de la OCDE, dijo que lo que se encontrarán en el estudio es un análisis comparado de buenas prácticas y cómo está el Gobierno de la CDMX respecto a los 13 principios acordados por los miembros del organismo, hacia dónde deben avanzar las políticas de integridad, qué se ha logrado, qué se ha hecho y recomendaciones para seguir mejorando en el presente y hacia las generaciones futuras.

Refrendó la importancia de presentar a la administración entrante el programa de seguimiento que le plantearán para ver cómo se va cumpliendo con las recomendaciones del estudio y encontrar soluciones a los obstáculos o problemáticas que se vayan suscitando.

Esto forma parte de las acciones del convenio firmado por el gobierno capitalino y dicho organismo en 2016 para implementar políticas de integridad y buenas prácticas de contratación pública y otras medidas para el desarrollo de capacidades en la administración pública local.

El objetivo es fortalecer y posicionar a la CDMX a la vanguardia, con acciones encaminadas a la aplicación de mejores prácticas y experiencias exitosas internacionales en materia de combate a la corrupción; así como incentivar la cultura de la integridad y participación en la toma de decisiones de las personas servidoras públicas, ciudadanos y sector privado.

A través de dicho acuerdo de subvención la OCDE evalúa las acciones del gobierno de la ciudad y emite propuestas concretas. Además, estudia las políticas de integridad y buenas prácticas de contratación pública y otras medidas para el desarrollo de capacidades.

Durante el proceso de revisión, organizó talleres y debates sobre políticas con expertos y funcionarios de instituciones homólogas de los países miembros de este organismo internacional, así como del Comité de Gobernanza Pública de la OCDE y sus redes afiliadas.

La Contraloría capitalina en este proceso ha capacitado a 127 mil 846 personas servidoras públicas mediante el curso “Ética, Conflicto de Intereses y Política de Integridad”.

Cabe señalar que el mandato del Comité de Gobernanza Pública de la OCDE consiste en brindar asistencia a los países miembros y no miembros a fin de formar y fortalecer la capacidad para diseñar, implantar y evaluar unas políticas, instituciones y servicios públicos adaptables, innovadores, centrados en el ciudadano y con capacidad de anticipación.

El Comité recibe la ayuda del personal de la División de Integridad Pública de la Dirección de Gobernanza Pública (GOV), con lo que se fomenta el aprendizaje mutuo y la divulgación de las mejores prácticas.

De igual manera, brinda apoyo a los países en su afán por construir mejores sistemas de gestión pública e introducir políticas en todos los niveles del gobierno que colaboren al logro de un crecimiento sostenible e incluyente.

También ayuda a los gobiernos a diseñar y aplicar políticas estratégicas, innovadoras, basadas en datos empíricos que fortalezcan la gobernanza pública, respondan con eficacia a diversos problemas y obstáculos económicos, sociales y ambientales, y cumplan los compromisos públicos ante las personas.

Finalmente, el Jefe de Gobierno instruyó a hacer entrega de estos resultados al gobierno entrante en la última reunión de los Equipos de Transición para su conocimiento y seguimiento del tema.