Fotografía: Valentina López
Por: Miriam Ibarra
Buscan aspirantes rechazados de la UNAM modificaciones a los mecanismos de ingreso a la Máxima Casa de estudios durante asambleas realizadas en pleno campus de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), porque consideran que “la educación es un derecho, no un privilegio”.
Fotografía: Valentina López
El día de hoy se llevaron a cabo dos asambleas frente al edificio de Rectoría de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), reuniones convocadas por el Movimiento de Aspirantes Excluidos de la Educación Superior (MAES) y por el Movimiento de Estudiantes No Aceptados (MENA).
En punto de las 12:00 del mediodía se reunieron los integrantes de cada movimiento, para comenzar cada quien con la asamblea correspondiente cerca de la 1:30 de la tarde. Estas asambleas fueron las primeras para los rechazados de este año de la UNAM.
Fotografía: Valentina López
Durante las asambleas se informaron las cifras de los alumnos que se quedaron sin lugar, este 2015 las personas que presentaron el examen de colocación para alguna carrera de Universidad Nacional Autónoma de México fueron 130 mil y obtuvieron un lugar tan solo 6 mil alumnos. Según el MENA son 600 alumnos menos que el año pasado.
Es por eso que con diversos movimientos piden a la Secretaria de Educación Pública y a las autoridades de la UNAM poder entablar un diálogo, ya que año con año tienen que salir a la calle para solicitar que se aumente el número de aceptados a la UNAM. Ambos grupos también buscan un cambio en el modo de selección, creen que el examen de colocación no es la mejor manera para decidir si alguien es apto o no para estudiar el nivel superior.
Fotografía: Valentina López
Ambos movimientos lograron juntar cerca de 100 manifestantes el día de hoy, cada uno en su respectiva asamblea, pero con el mismo fin: educación superior para toda la población mexicana.
El MAES asegura que: “ser aceptado en la UNAM no depende de los conocimientos y las capacidades de los aspirantes, el verdadero problema está en una política educativa orientada a restringir el crecimiento de las universidades públicas”. Es por ello que el día de hoy se cumplen 10 años desde la primera vez que el Movimiento convoca a una asamblea frente a la puerta de Rectoría, al día siguiente de la publicación de los resultados del examen de colocación, para exigir el derecho a la educación.
Fotografía: Valentina López
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