Por: Karen López

El gobierno de México dio a conocer que su compromiso de disminuir partículas contaminantes, principalmente carbono negro, es del 51% al 2030, lo que podría representar en CO2 equivalente, una moderación del orden del 3% de las emisiones nacionales.

Esto en un evento organizado por la Coalición de Clima y Aire Limpio para la Reducción de Contaminantes Climáticos de Vida Corta (CCVC) en el marco de la COP21 en París.

El Subsecretario de Planeación y Política Ambiental de la SEMARNAT, Rodolfo Lacy Tamayo, indicó que el porcentaje del 51% podría incrementarse hasta un 70% en caso de que los países lleguen a un acuerdo que incluya, entre otros aspectos, un precio internacional al carbono.

Destacó que el acuerdo debe comprender también aspectos sobre gravámenes en esta materia, cooperación técnica, acceso a recursos financieros y trasferencia tecnológica en una dimensión equivalente al desafío que enfrenta el mundo.

El funcionario, quien forma parte de la delegación mexicana en la COP21, explicó que las políticas públicas en México están enfocadas a la reducción de CCVC debido a que la Ley General de Cambio Climático precisa dar prioridad a las acciones de mayor potencial al menor costo, que generen co-beneficios para la salud y el bienestar de los mexicanos.

Señaló que en el caso de los CCVC, las partículas de carbono negro tienen un impacto significativo a corto plazo sobre el cambio climático, pero además tienen un efecto negativo en la calidad del aire y por consiguiente en la salud de la población, por lo que las acciones orientadas hacia el abatimiento de estas emisiones tendría múltiples beneficios además de contribuir a la mitigación del cambio climático en el corto plazo.