Por: Redacción

A nivel mundial, los sistemas de transporte público en la Ciudad de México se encuentran entre los tres más peligrosos para las mujeres, por lo que la Comisión Permanente solicitó al gobierno de la capital de la República Mexicana que realice una campaña masiva por el respeto mutuo y trato digno, sin discriminación.

Al fundamentar el dictamen, la senadora Carmen Dorantes Martínez, del Grupo Parlamentario del PRI, explicó que la mayoría de los usuarios consideran que el transporte es lento y peligroso, pues el promedio de antigüedad de las unidades es de 27 años; además de que no es adecuado para personas con discapacidad, adultos mayores y niños.

Destacó que varios estudios internacionales ponen en evidencia que el transporte público de la Ciudad de México es sumamente inseguro para las mujeres, quienes enfrentan agresiones como tocamientos, palabras obscenas, acoso, intimidación, miradas lascivas, y en casos extremos violación.

El dictamen refiere que, de acuerdo con la Encuesta Anual 2015, del Gabinete de Comunicación Estratégica sobre transporte público, la percepción de los usuarios es que los transportes con mayor inseguridad son combis, Metrobús, y Metro, en ese orden, seguidos por el microbús, autobús, y al final el taxi.

Agrega que los mecanismos de transporte masivo “se han convertido en el escenario perfecto derivado de las aglomeraciones, para ser víctima de diversos delitos como el robo y el acoso sexual”.

La inseguridad, destaca, ha obligado a que el 25.3 por ciento de los pasajeros dejen de usar el transporte público en ciertos horarios; 22.6 por ciento ha optado por utilizar automóvil propio; 17 por ciento realiza cambios de ruta; 10.8 por ciento no utiliza objetos de valor; en tanto que seis por ciento cambia de transporte.