Por. Redacción/

El coordinador de los diputados federales del PRD, Francisco Martínez Neri, aseguró que de continuar con el fallido modelo económico, México estará condenado a no crecer y a largo plazo se continuará con una fatídica trayectoria negativa, que traerá como consecuencia que el poder adquisitivo del salario se siga depreciando y el nivel de vida de la población se deteriore una más.

“De no existir un cambio al modelo económico lo más probable es que nos mantengamos en esa tendencia de crecimiento mediocre, con lo que sin duda la brecha de desigualdad se recrudecerá”, indicó.

El líder perredista detalló que el nivel de confianza económica en México es 30 por ciento menor que hace 15 años. “Estamos en un periodo de expectativas rotas, porque en 2014 se pronosticaba que el país crecería durante la siguiente década a un ritmo del cuatro por ciento anual; sin embargo, la última proyección, en diciembre 2017, fue de 2.7% para los siguientes 10 años”.

Aunado a ello, el salario mínimo sigue muy por debajo de las expectativas para cubrir las necesidades básicas, lo que impacta de manera directa con la calidad de vida de la población.

“De acuerdo con el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) el ingreso laboral real en términos de poder adquisitivo se redujo severamente durante 2017, derivado del raquítico aumento salarial que se dio”, indicó.

El legislador por Oaxaca puntualizó que a pesar de que se dio dicho aumento, el costo de la canasta básica se elevó casi el doble que el índice nacional de precios al consumidor. “Estamos otra vez en la necesidad, por un lado, de estabilizar los precios y, por otro lado, de conseguir una estabilización que no recargue el costo de la baja de la inflación en los trabajadores”.

Explicó que si bien se dio un crecimiento de empleo registrado por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), también es cierto que el grueso del crecimiento se ubica en la franja entre uno o dos salarios mínimos.

“En concreto, si la mayor parte de ese crecimiento se da en la franja de bajos ingresos cobra mayor relevancia la discusión del ingreso ciudadano, porque están forjando una burbuja irreal de estabilidad, ya que los empleos generados son mal pagados y en consecuencia las aspiraciones a una jubilación digna son nulas”, advirtió.

Enfatizó que el salario mínimo está en 88. 36 pesos diarios, pero la realidad es que quedó muy por debajo del costo de una canasta alimentaria personal, por lo que sigue siendo insuficiente. El problema de fondo es que está por debajo de los niveles constitucionales.

Ante este panorama, Martínez Neri reiteró que el GPPRD seguirá pugnando por aumentar significativamente el salario mínimo “y desaparecer la Conasami, porque es una entelequia y representa un régimen que ya no va acorde con las circunstancias actuales”.