Por: Redacción/

La ONU está “siguiendo de cerca” las manifestaciones y concentraciones que están teniendo lugar en Venezuela y ha pedido “negociaciones políticas inclusivas y creíbles” para abordar los retos en el país.

El portavoz del Secretario General, Farhan Haq, ha pedido a “todos los grupos en el terreno” que rebajen las tensiones y hagan “todos los esfuerzos para evitar una escalada”.

Las Naciones Unidas, recordó, “rechazan cualquier tipo de violencia política” y pidió que todos los actores relevantes “se comprometan a unas negociaciones políticas inclusivas y creíbles” que respeten “el Estado de derecho y los derechos humanos”.

Según informaciones de prensa, miles de venezolanos se han manifestado ese miércoles en los 23 estados del país y el Distrito Capital, en el marco de una movilización convocada por la oposición para no reconocer la legitimidad del segundo mandato del presidente Nicolás Maduro, que acaba de comenzar. Grupos oficialistas también han salido a las calles. Según informaciones de las ONG locales recogidas por los medios, al menos cuatro personas han muerto y varias decenas han sido detenidas en las marchas.

Más de tres millones de venezolanos han abandonado su país en los últimos años ante la crisis económica, social y política. La ONU estima que en 2019 dos millones de venezolanos más saldrán del país y la cifra llegará a los 5,3 millones de migrantes y refugiados en diciembre de 2019.

La Alta Comisionada para los Derechos Humanos ha recibido una invitación formal del Gobierno de Venezuela para visitar el país. Michelle Bachelet ha contestado a las autoridades venezolanas exponiendo la necesidad de que un equipo técnico visite antes el país.

La portavoz, Ravina Shamdashani, explicaba que el envío de un equipo técnico es algo que se hace siempre antes de la visita de la Alta Comisionada y ellos se encargan de asegurar que tenga acceso a “todas las áreas necesarias”.

En este caso, de momento no se han concretado una fecha ni los lugares que Bachelet querría visitar. “Habitualmente cuando un Alto Comisionado va a un país suele llevar a cabo viajes fuera de la capital, a zonas donde haya denuncias de violaciones de los derechos humanos, o a centros de detención”, dijo la portavoz, que aclaró que por ahora sólo ha habido un contacto inicial con las autoridades venezolanas, por lo que, de momento, no hay puntos de desacuerdo sobre la visita.