Por: Mugs Redacción

La ciudad de México requiere de una política de movilidad que incluya la problemática real de la urbe y los ciudadanos, consideró la doctora Priscilla Connolly Dietrichsen, investigadora del Departamento de Sociología de la Unidad Azcapotzalco de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).

Entrevistada luego de su participación en el Segundo Coloquio Anual Espacialidades, realizado en la Unidad Cuajimalpa, la profesora de Sociología Urbana y Planeación Metropolitana dijo que los responsables en la toma de decisiones desconocen el tema.

“La movilidad determina las relaciones entre los individuos y es mucho más que ir de un lado a otro”, pues “la forma cómo te mueves y dónde lo haces describe muchas cosas en torno a las relaciones sociales, económicas y culturales”.

El Estado tiene la responsabilidad de garantizar y satisfacer el derecho a la movilidad, sobre todo ahora que ha adquirido un significado nuevo, más allá del libre tránsito.

La también especialista en política medioambiental y vivienda consideró que las iniciativas sobre la materia tienen un fundamento basado en la conciencia sobre la degradación del espacio natural y la conservación del entorno.

Respecto de la Ley de Movilidad, la doctora Connolly Dietrichsen expresó que “está llena de buenas intenciones”, tiene como virtud reconocer prioridades: primero el peatón, seguido del transporte no motorizado, público y al último el automóvil, pero las inversiones públicas favorecen más la movilidad individual que la colectiva.

“La toma de decisiones sobre el asunto no se basa en un debate razonado con la participación de la gente informada y los sectores afectados”, agregó la Profesora Distinguida de la UAM.

Al dictar la ponencia magistral: Reflexiones personales sobre el espacio y sus representaciones resaltó que el estudio del espacio es importante por ser una dimensión indispensable para entender cómo se relaciona la gente.