Por: Redacción

La estrategia de Trump para sus negociaciones, siempre ha sido la de aplastar a su contraparte y como presidente, así ha enfocado sus esfuerzos contra México en el tema del Tratado de Libre Comercio (TLC), en donde pretende crear una cortina de humo que le permita al final del camino, meter al país en una ruta vulnerable en otros temas como el petróleo, señaló la Vicecoordinadora de Proceso Legislativo de su bancada en San Lázaro, Eloísa Talavera Hernández.

Explicó que ubicación geográfica estratégica entre las dos naciones y los factores de producción, se reflejan en el hecho de que México representa el primer, segundo o tercer mercado para 33 de los 50 estados que forman los EEUU; las exportaciones de Texas a México en 2016, equivalentes a 92.7 mmd, superaron por 12.4 mmd a las exportaciones de todo EEUU a Alemania y Francia –las economías más grandes de la zona del Euro–.

Además, dijo, alrededor de 6 millones de empleos en la Unión Americana dependen del comercio bilateral con México y recordó que Estados Unidos invirtió más en México que en cualquier otra economía emergente en 2016, con 10.4 mil millones de dólares.

Talavera Hernández refirió que en Estados Unidos, viven aproximadamente 35.3 millones de personas – 11.0 por ciento de la población– de origen mexicano.

Esto le suma a los beneficios en términos de logística que representa la vecindad geográfica, lo anterior propicia la producción conjunta a través de la creación de cadenas de valor que explotan las ventajas comparativas que cada país ofrece, dijo.

La legisladora enfatizó que nuestro país y EU no solo comercian entre sí, sino que producen juntos y América del Norte compite en términos comerciales con otras regiones del mundo.

Detrás de estos datos, indicó, se encuentra una elevada y creciente integración de cadenas productivas en América del Norte, que ha generado que alrededor de 40.0 por ciento del valor de las importaciones de EEUU provenientes de México proceda a su vez de EEUU.

Esta integración, afirmó, ha sido potenciada por el TLC, al establecer reglas claras para la interacción y certidumbre jurídica, pero a un nivel más básico se encuentran la complementariedad en términos demográficos y la proximidad geográfica, que de manera natural brindan oportunidades para la asociación estratégica.

Dados estos lazos estructurales con la Unión Americana, el gobierno de Peña Nieto debe de tener la certeza de que cualquier negociación con su contraparte Trump, debe de estar cimentada en el mutuo beneficio a lo largo de los años, sin permitir que el presidente norteamericano busque -acorralarlo- en temas estructurales para México, usando al TLC como moneda de cambio, señaló.

Puntualizó que desde el Congreso, los legisladores de Acción Nacional estarán vigilantes para evitar en lo posible, que México sea sometido de manera injustificada, a negociaciones que laceren los intereses nacionales.