Por: Redacción/

Es urgente fortalecer y hacer valer el marco jurídico, así como las políticas públicas que protejan los derechos humanos y mejoren la calidad de vida de este sector de la sociedad, ya que en 15 años México será un país de adultos mayores”, advirtió la senadora Lisbeth Hernández Lecona.

Destacó que el envejecimiento de la población implicará una mayor demanda de servicios de salud y que los padecimientos de las personas en edades avanzadas tienden a concentrarse en males crónicos-degenerativos.

En el conversatorio “Avances y desafíos en la protección de los derechos de las personas adultas mayores”, agregó, que otro de los retos es instrumentar medidas y programas preventivos que permitan reducir la tasa de discapacidad para, así, incrementar la esperanza de vida y permitir que un mayor número de individuos disfrute de su vejez en condiciones físicas y mentales aptas.

Hernández Lecona consideró que la intervención de las autoridades, a través de una atención profesional y especializada, debe centrase en la prevención y disminución de las principales formas de discriminación: abandono, maltrato, rechazo, pobreza, discapacidad y violencia.

La Secretaria General del Consejo Nacional de Población, Patricia Chemor Ruiz, precisó que actualmente la población que tiene 60 o más años asciende 12.9 millones de personas y se estima que aumentará a 32.4 millones en 2050.

En términos relativos, añadió, la proporción de población envejecida crecerá de 10 a 21.5 por ciento y, en ese año, habrá más adultos mayores que niños de cero a cinco años.

Chemor Ruiz aclaró que, según las estadísticas nacionales, después de rebasar el 10 por ciento con población de 60 o más años, los países comienzan a llamarse países envejecidos; “México, naciones de Latinoamérica, Europa y Asia ya somos países envejecidos”.

Luis Miguel Gutiérrez Robledo, director general del Instituto Nacional de Geriatría, aseveró que el reto que representa la atención de la salud por este factor en 2050, ya se enfrenta en el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado y en Petróleos Mexicanos, que cuentan, respectivamente, con 20 y 30 por ciento de trabajadores adultos mayores.

Dijo que, para enfrentar este fenómeno demográfico, a los mexicanos les preocupa la discriminación, el desempleo y la pobreza, el problema de las enfermedades, la salud y la dependencia.

Silvia García López, del Departamento de Enseñanza, Investigación e Información del INAPAM, señaló que este sector “está creciendo a un ritmo que se nos va a salir de control en el 2050 y no hay dinero que alcance” para su atención.

La senadora Angélica del Rosario Araujo Lara, del Grupo Parlamentario del PRI, asentó que en el Senado de la República “asumimos la responsabilidad” de integrar políticas públicas, leyes y presupuestos en esta materia.

Su compañera de bancada, senadora Margarita Flores Sánchez, destacó la importancia de combatir los abusos en contra de los adultos mayores. En la Cámara de Senadores, dijo, “seguiremos trabajando por leyes que permitan que los adultos tengan una mejor calidad de vida”.