Por: Redacción

El diputado Agustín Basave, del GPPRD, subrayó que la corrupción no es un fenómeno cultural; la corrupción tiene origen en incentivos legales perversos y después, genera una inercia cultural y para combatirla, hay que eliminar esos incentivos perversos.

“El pasto social en México está seco. Basta una chispa para encender la pradera. La gente está enojada, hay hartazgo pero vemos la tempestad y no nos arrodillamos”, dijo el perredista al tomar la palabra durante el apartado de Agenda política, en el que se abordó el tema de la “Situación política nacional”.

El secretario de la Comisión de Relaciones Exteriores reiteró que la corrupción es el cáncer de México y detalló que la impunidad es una parte sustancial de esta problemática.

“El problema no es que exista la corrupción, la hay en todo el mundo, en todos los partidos políticos mexicanos, en todos los órdenes de gobierno; el problema es que no la combatimos, el problema es qué hacemos cuando se detecta un caso de corrupción. Lo que distingue a un partido de otro, a un mexicano de otro, es cómo reacciona ante un caso de corrupción; si lo castiga, condena, o si lo solapa y lo protege”, argumentó.

Recordó que en la historia reciente de nuestro país hay antecedentes de exgobernadores perseguidos por la justicia, pero no por la mexicana; “no empieza esa persecución, esos actos de justicia en este país; empiezan en otros países, en Estados Unidos, en Brasil, o en otras partes del mundo y después, una vez que somos exhibidos, entonces no queda más remedio que tomar cartas en el asunto. Ojalá que de verdad se mostrara la voluntad política para combatir la corrupción aquí en México”, sostuvo.

Advirtió que seguramente, desde Estados Unidos de Norteamérica, habrá acusaciones contra otros funcionarios públicos mexicanos y aquí “solamente cuando la presión de la opinión pública internacional llega cuando llega el agua a los aparejos, es cuando se empieza a actuar. Esa es la triste realidad”.

Mencionó el caso del desafuero -que no se ha logrado- del diputado priista Tarek Abdala, acusado de un desvío millonario de recursos cuando fungió como tesorero de Javier Duarte, exgobernador de Veracruz actualmente detenido en Guatemala, luego de varios meses de haber estado prófugo.

Basave sostuvo que al no desaforar al legislador priista “estamos mandando el mensaje equivocado a la sociedad; le estamos diciendo que la Cámara de Diputados tampoco quiere combatir la corrupción y prefiere solaparla” y agregó que el Sistema Nacional Anticorrupción – que había generado las mayores expectativas entre la sociedad mexicana- se está convirtiendo en la “Simulación Nacional Anticorrupción”.

El perredista sugirió que se aborde el apartado de agenda política cotidianamente y no solo en el cierre del periodo ordinario del Congreso, pues el Poder Legislativo, además de legislar, tiene por obligación debatir y ser una caja de resonancia de los problemas del país.