Por: Redacción

La presidenta de la Comisión Especial sobre no Discriminación, diputada Kathia María Bolio Pinelo (PAN), lamentó que la población más discriminada en México sean las mujeres; personas sin acceso a oportunidades laborales por su condición de vida; integrantes de la comunidad lésbico, gay, bisexual, transgénero, travesti, transexual e intersexual (LGBTTI), y los afrodescendientes, que “ni siquiera son tomados en cuenta”.

En reunión con funcionarias del Consejo Nacional para Prevenir La Discriminación (Conapred), subrayó que para combatir la cultura de exclusión e impulsar la inclusión en México, se debe apostar por la educación y cambiar la visión de los habitantes de un país pluricultural, como el nuestro. Muchas veces discriminamos en el país “porque no conocemos su diversidad”.

Estimó necesario fortalecer las acciones de inclusión; perfeccionar las leyes en la materia y dotar de presupuestos suficientes a la educación, para posibilitar el acceso de personas con discapacidad e incrementar sus posibilidades de aprender, comunicarse, relacionarse y de rehabilitación.

“Sumemos esfuerzos y trabajemos de la mano, sin colores partidistas, por la igualdad y la inclusión social de grupos vulnerables y en pro de los derechos humanos”, enfatizó.

Bolio Pinelo dijo que el tema de la deportación de mexicanos desde Estados Unidos se ha incluido en plan de trabajo de esta Comisión Especial, debido a “todo lo que está haciendo el gobierno de esa nación, expulsándolos en condiciones deplorables”.

La diputada Karina Sánchez Ruiz (NA), secretaria de la Comisión de Derechos Humanos, dijo que muchas problemáticas de la discriminación se podrían resolver si se trabajara en la génesis de la cultura y la educación. Propuso elaborar un registro de casos de discriminación por origen étnico, creencias religiosas y discapacidad, y que haya una coordinación con la Comisión Nacional de los Derechos Humanos para atenderlos.

Del grupo parlamentario de Morena, la diputada Blandina Ramos Ramírez pidió no olvidar la defensa de las mexicanas y mexicanos que “padecen en los Estados Unidos las deportaciones y necesitan el apoyo de las legisladoras y legisladores”.

La diputada Norma Edith Martínez Guzmán (PES) pidió que el Conapred analice “la situación que vive la Ciudad de México, que implica una discriminación a quienes están en el vientre de su madre, pues resulta que si tienes 12 semanas, no tienes derecho a ser protegido, si tienes 13 o más, sí”.

Añadió que la discriminación religiosa, sobre todo en comunidades indígenas, ha provocado desplazamientos, pérdida de bienes, familia e integridad.

En su intervención, la directora general adjunta de Vinculación, Cultura y Educación del Conapred, Tania Ramírez Hernández, señaló que las principales causas de discriminación en México son la discapacidad, el embarazo y la condición de salud, en los ámbitos laboral, educativo y de prestación de servicios al público.

Informó que en 2016, el organismo recibió 877 quejas contra particulares y 294 contra autoridades federales, mil 171 en total; se concluyeron mil 554 expedientes, incluyendo el rezago de años anteriores, y se dio seguimiento a 300 medidas administrativas y a 133 de reparación.

Propuso impulsar una legislación antidiscriminatoria y de reconocimiento a la comunidad afrodescendiente, de migrantes, LGBTTI y de trabajadoras del hogar, entre otras; además, armonizar el marco legislativo en la materia.

Consideró que se debe combatir la discriminación y posicionar la inclusión de los beneficios morales, éticos y económicos, fundamentales para el desarrollo del país. “Los bonos que representamos las mujeres, las personas jóvenes, indígenas, migrantes deportados, somos un valor contable, contante y sonante, y eso en escenarios de crisis económica es muy importante”.

Además, continuó, es necesario impulsar un cambio cultural y de estructura, pues la discriminación está arraigada en la mentalidad y la cultura. “Suceden en individuos las percepciones, pero también, de manera estructural, cuando el diseño de leyes, políticas e instituciones contempla, en su origen, la exclusión de personas por no reconocer la diversidad, prejuicios, estigmas” y otros factores.

Informó que en colaboración con INEGI, CNDH, UNAM y el Conacyt, se realizará el tercer levantamiento de la Encuesta Nacional sobre Discriminación (ENAID), para actualizar y ampliar la información sobre la situación que enfrentan algunos grupos de la población de México, e identificar y medir la incidencia de prejuicios, estigmas y estereotipos instalados en ámbitos sociales.

La investigación permitirá estudiar experiencias de discriminación y el carácter estructural del fenómeno, y construir indicadores útiles para políticas de prevención y erradicación de las desigualdades de trato y estructurales en áreas de salud, educación, trabajo, desarrollo social, combate a la pobreza y cultura.

Señaló que se requiere un cambio cultural, para lo cual se deben impulsar campañas de comunicación masivas, activación en redes sociales y articularse con entidades federativas para la difusión.

Asistieron a la reunión Mireya del Pino Pacheco, directora de Estudios y Políticas Públicas, del Conapred, y Nuriney Mendoza Ayala, directora general adjunta de Quejas del organismo.