Por: MUGS Redacción

 

En la víspera de la Asamblea General de las Naciones Unidas para la discusión de la política de drogas, es el momento oportuno para replantear una política que aborde, desde el enfoque preventivo y de salud pública, el manejo de las drogas y su reclasificación para permitir sus usos en distintas actividades, particularmente en las médicas y de investigación científica.

 Así lo plantearon el senador del grupo parlamentario del PRD, Alejandro Encinas, el investigador Dan Werb, el ex diputado Fernando Belaunzarán y otros especialistas en la presentación de la publicación “Usando la evidencia para hablar de cannabis”.

 Encinas Rodríguez subrayó que el uso de la marihuana es un tema que el Poder Legislativo y el país deben des-estigmatizar. Dijo que es momento de dar un nuevo enfoque a la política de drogas, abandonar la criminalización de los usuarios y la política prohibicionista, que lo único que ha logrado es empoderar a los grupos delictivos en lo económico, lo político y financiero.

 Indicó que con miras a la Asamblea General de las Naciones Unidas para la discusión a fondo de la política de drogas, es el momento oportuno para replantear una política con enfoque preventivo y de salud pública en el manejo de las drogas.

 Se pronunció a favor de entrar en una reclasificación de las drogas para permitir sus usos en distintas actividades, particularmente el uso médico y la investigación científica, e incluso permitir su producción industrial para uso recreativo, con la regulación del Estado.

 En relación al caso de la niña Graciela Elizalde quien padece de una epilepsia compulsiva grave, aseveró que la legislación mexicana impide un tratamiento médico que le puede disminuir o mitigar significativamente los efectos de esa enfermedad.

 Debido a ello, subrayó que es oportuno entrar a la discusión de una nueva política de drogas, en el que el gobierno mexicano debe asumir experiencias como la establecida por el General Lázaro Cárdenas para regular el uso de estas drogas.

 Dan Werb, director del Centro Internacional para la Ciencia en Política de Drogas (ICSDP), subrayó que el discurso público sobre cannabis está frecuentemente lleno de afirmaciones repetidas que simplemente no se sustentan en la evidencia científica.

 Aseveró que las decisiones políticas se ven influidas por la opinión pública y los medios de comunicación, por lo que existe un serio peligro de que, al tergiversar la evidencia científica, se desarrollen políticas ineficaces o perjudiciales.

 Señaló que el caso de México es bastante particular o crítico, ya que el Ejecutivo Federal piensa que el uso de la mariguana es la puerta de entrada a otras drogas como la heroína o cocaína, y esto es un ejemplo de argumentos de desinformación que conducen a una política pública errada, no basada en la ciencia que puede ayudar al debate público.

 El exdiputado del PRD, Fernando Belaunzarán consideró que este es un debate crucial para el país, y pidió a la Secretaría de Salud ver a las personas valiosas por sí mismas, y que no interpongan una ideología o político por encima de la necesidad de la gente.

 Raúl Elizalde, padre de la niña Graciela Elizalde, quien padece de una forma grave de epilepsia, explicó que su hija es refractaria para todos los medicamentos epilépticos que hay en el mercado y, a pesar de haber sido intervenida quirúrgicamente, sigue convulsionándose día a día.

 Expuso que a la Secretaría de Salud se le solicitó la utilización del aceite de cannabidiol (CBD), sobre el que existe evidencia que ha ayudado a otros niños en otras partes del mundo. El Consejo de Salud de la dependencia se negó, ante ello, presentaron un amparo para que se respete a Graciela su derecho a la salud.

 Esta, dijo, es una cuestión médica, de humanidad y derechos humanos: “mi hija tiene derecho a cualquier tratamiento que le pueda beneficiar a su condición, como gobierno no se puede negar a este acceso de medicamentos y tratamiento”.

 La abogada Luisa Conesa Labastida denunció que el debate se basa en estigmas y consideraciones no probadas, por lo que está entrampado y, por la vía legislativa, no logró el avance esperado. Por ello se ha planteado la vía jurisdiccional en el caso de la salud, ampliamente documentada con evidencia científica.

 En el caso de Gabriela, dijo, se solicitó autorización para importar el cannabidiol, una sustancia del cannabis que no tienen un componente psicoactivo, sobre el cual hay mucha evidencia para tratar la epilepsia.