Por: Redacción/

Con un estudio básico de aplicación clínica para mejorar el tratamiento de la neurocisticercosis, Graciela Agar Cárdenas Hernández, quien desarrolló su tesis doctoral bajo la asesoría de Agnes Marie Odile Fleury, del Instituto de Investigaciones Biomédicas (IIBm) de la UNAM, ganó el “Premio Lola e Igo Flisser-PUIS de Parasitología”.

En su 30 edición, el premio que entrega la familia Flisser y el Programa Universitario de Investigación en Salud (PUIS) de la Universidad Nacional eligió el trabajo de Cárdenas Hernández, de entre 15 que participaron, indicó Samuel Ponce de León, coordinador del PUIS.

En la sala de Consejo Técnico de la Coordinación de la Investigación Científica (CIC), la galardonada, quien cursó la especialidad en Neurología en la UNAM, presentó una síntesis de su trabajo “Determinación de la respuesta inflamatoria asociada al tratamiento de la neurocisticercosis subaracnoidea. Implicaciones patológicas y terapéuticas”.

La inflamación como indicador
La inflamación en un inicio es un fenómeno protector y reparador, que se genera ante un proceso lesivo, pero si se prolonga durante semanas o años, induce una especie de autoataque al cuerpo, que a su vez creará más inflamación. Ésta se relaciona con enfermedades parasitarias y neurodegenerativas, explicó la investigadora del Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía Manuel Velasco Suárez.

En su estudio, la neuróloga evaluó la función de 190 genes que operan durante la neurocisticercosis, una enfermedad del sistema nervioso central de origen parasitario, causada cuando el cisticerco del cerdo se aloja en el cerebro humano. Los 18 genes más relevantes estuvieron asociados a respuesta inmunológica.

El trabajo tiene una aplicación clínica. “Para el tratamiento de ese padecimiento, los neurólogos damos a los pacientes corticosteroides, sustancias antiinflamatorias, pues los afectados desarrollan hidrocefalia, infartos cerebrales y meningitis basal, potencialmente fatales”, expuso.

No obstante, tienen algunos efectos adversos. “Bajan la respuesta inflamatoria, pero si se reduce demasiado es contraproducente, pues no se elimina el parásito”, subrayó.

El estudio, comentó, indica que no podemos dar el mismo tratamiento a todos los pacientes, sino que se debe hacer un subanálisis para saber quiénes deben recibir dosis menores, o incluso no recibir este tipo de medicamentos.

Esta tesis ha servido de base para hacer un estudio clínico más extenso con pacientes con menos dosis de esteroides, detalló.

Cárdenas Hernández estudió medicina en la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco y cursó la especialidad en Neurología en la UNAM. Hizo su base hospitalaria en el Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía Manuel Velasco Suárez, en donde se formó y labora actualmente.

En el evento estuvieron presentes Ana, Manuel y Ariela Mishy Flisser, por parte de la familia cuyo mecenazgo hace posible el premio, y José Manuel Saniger Blesa, secretario de Investigación y Desarrollo de la Coordinación de la Investigación Científica de la UNAM.